Abrahán cayó rostro en tierra y se puso a reír diciéndose a sí mismo: '¿A un hombre de cien años le podrá nacer un hijo, y Sara a los noventa años podrá ser madre?'.
2 Reyes 4:14 - Biblia Martin Nieto Eliseo dijo: '¿Qué podríamos hacer por ella?'. Guejazí respondió: '¡No tiene hijos y su marido es ya viejo!'. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y él dijo: ¿Qué, pues, haremos por ella? Y Giezi respondió: He aquí que ella no tiene hijo, y su marido es viejo. Biblia Nueva Traducción Viviente Más tarde, Eliseo le preguntó a Giezi: —¿Qué podemos hacer por ella? —Ella no tiene hijos —contestó Giezi—, y su esposo ya es anciano. Biblia Católica (Latinoamericana) Eliseo volvió un día a tocar el tema: 'Pues bien, ¿qué se puede hacer por ella?' Guejazí respondió: 'No tiene hijos y su marido ya es viejo'. La Biblia Textual 3a Edicion Y él dijo: ¿Qué puede hacerse entonces por ella? Y respondió Giezi: En verdad ella no tiene hijo, y su marido es anciano. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Preguntó luego Eliseo a Guejazí: '¿Qué se podría hacer por ella?'. Respondió Guejazí: 'Desgraciadamente, ella no tiene hijos y su marido es ya viejo'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y él dijo: ¿Qué, pues, haremos por ella? Y Giezi respondió: He aquí ella no tiene hijo, y su marido es viejo. |
Abrahán cayó rostro en tierra y se puso a reír diciéndose a sí mismo: '¿A un hombre de cien años le podrá nacer un hijo, y Sara a los noventa años podrá ser madre?'.
Isaac rezó al Señor por su mujer, que era estéril. El Señor le escuchó, y Rebeca quedó encinta.
Viendo Raquel que no daba hijos a Jacob, tuvo envidia de su hermana y dijo a Jacob: 'Dame hijos, si no me muero'.
Eliseo ordenó a su criado: 'Dile: Nos estás prodigando toda clase de cuidados; ¿qué podría hacer por ti? ¿Tienes alguna solicitud que elevar al rey o al jefe del ejército?'. Ella respondió: 'En medio de mi pueblo vivo'.
No tenían hijos, porque Isabel era estéril y los dos de avanzada edad.
Había un hombre en Sorá, de la tribu de Dan, llamado Manóaj, cuya mujer era estéril. No había tenido ningún hijo.
Tenía dos mujeres: una llamada Ana, y la otra, Peniná. Peniná tenía hijos; Ana no los tenía.
Elcaná, su marido, le dijo: 'Ana, ¿por qué estás tan triste? ¿No soy yo para ti más que diez hijos?'.