Si os dicen que está en el desierto, no salgáis; si en un escondite, no lo creáis.
2 Pedro 3:14 - Biblia Martin Nieto Por lo cual, queridos hermanos, en espera de todas estas cosas, esforzaos por encontraros sin mancha, sin culpa y en paz en presencia del Señor. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Por lo cual, oh amados, estando en espera de estas cosas, procurad con diligencia ser hallados por él sin mancha e irreprensibles, en paz. Biblia Nueva Traducción Viviente Por lo cual, queridos amigos, mientras esperan que estas cosas ocurran, hagan todo lo posible para que se vea que ustedes llevan una vida pacífica que es pura e intachable a los ojos de Dios. Biblia Católica (Latinoamericana) Con una esperanza así, queridos hermanos, esfuércense para que Dios los encuentre en su paz, sin mancha ni culpa. La Biblia Textual 3a Edicion Por lo cual amados, en tanto que aguardáis estas cosas, procurad con diligencia ser hallados por Él en paz, sin mancha e irreprensibles. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Por eso, queridos hermanos, mientras esperáis estos acontecimientos, procurad que él os halle en paz, sin mancha e irreprensibles. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Por lo cual, amados, estando en espera de estas cosas, procurad con diligencia que seáis hallados de Él en paz, sin mácula y sin reprensión. |
Si os dicen que está en el desierto, no salgáis; si en un escondite, no lo creáis.
Entonces se despertaron todas las muchachas y se pusieron a aderezar sus lámparas.
¡Dichoso ese criado si, al llegar su amo, lo encuentra cumpliendo con su deber!
'Ahora, Señor, puedes dejar morir en paz a tu siervo, porque tu promesa se ha cumplido:
Él os mantendrá firmes hasta el fin, para que nadie os pueda reprochar nada el día de la venida de nuestro Señor Jesucristo.
Por esto, queridos hermanos, manteneos firmes, inconmovibles, trabajando más y más en la obra del Señor, sabiendo que el Señor no dejará sin recompensa vuestro trabajo.
para que sepáis discernir lo más perfecto, a fin de que seáis puros e irreprensibles para el día de Cristo,
a fin de que seáis irreprochables y sin malicia, hijos de Dios irreprensibles en medio de esta generación perversa y descarriada, en medio de la cual brilláis como astros en el universo,
Nuestra patria está en los cielos, de donde esperamos al Salvador y Señor Jesucristo,
Que él fortalezca vuestros corazones en una santidad sin tacha ante Dios, nuestro Padre, para cuando venga Jesús, nuestro Señor, con todos los suyos.
Que el Dios de la paz os santifique plenamente, y que todo vuestro ser, espíritu, alma y cuerpo, sea conservado irreprochablemente para la venida de nuestro Señor Jesucristo.
que guardes el mandamiento sin mancha y sin reproche hasta la manifestación de nuestro Señor Jesucristo,
así también Cristo, después de haberse ofrecido una sola vez para quitar los pecados del mundo, aparecerá una segunda vez, sin pecado, para dar la salvación a los que le esperan.
La práctica religiosa pura y sin mancha delante de Dios, nuestro Padre, consiste en visitar a los huérfanos y a las viudas en sus tribulaciones y en guardarse de los vicios del mundo.
para que la pureza de vuestra fe mucho más preciosa que el oro que aunque acrisolado por el fuego se corrompe aparezca digna de alabanza de gloria y de honor cuando tenga lugar la manifestación de Jesucristo,
Queridos hermanos, ésta es la segunda carta que os escribo. En las dos, mi propósito es el mismo: conseguir, con mis consejos, que penséis rectamente.
de hecho, así se expresa en todas las cartas cuando trata de este tema. Es cierto que en éstas se encuentran algunos puntos difíciles, que los ignorantes e inestables tergiversan para su propia perdición, lo mismo que hacen con el resto de la Sagrada Escritura.
El que tiene esta esperanza en él se purifica a sí mismo, como él es puro.