su territorio se extendió desde Sidón, en dirección de Guerar, hasta Gaza; luego en dirección de Sodoma, Gomorra, Adama y Seboín, hasta Lesa.
2 Crónicas 14:12 - Biblia Martin Nieto y Asá los persiguió con su ejército hasta Guerar; todos los etíopes cayeron, sin quedar ni un superviviente, pues quedaron destrozados ante el Señor y su ejército. Los de Asá se apoderaron de una gran cantidad de botín Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y Jehová deshizo a los etíopes delante de Asa y delante de Judá; y huyeron los etíopes. Biblia Nueva Traducción Viviente Entonces el Señor derrotó a los etíopes en presencia de Asa y del ejército de Judá, y el enemigo huyó. Biblia Católica (Latinoamericana) Asá y la gente que estaba con él los persiguieron hasta Guerar y cayeron de los etíopes hasta no quedar uno vivo, pues fueron destrozados delante de Yavé y su campamento; y se recogió un botín inmenso. La Biblia Textual 3a Edicion Y YHVH derrotó a los etíopes delante Asa y de Judá, y los etíopes huyeron. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Asá y su ejército los persiguieron hasta Guerar. Cayeron tantos etíopes que no quedó uno vivo, porque quedaron exterminados ante Yahveh y su ejército. Y se llevaron un grandísimo botín. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y Jehová deshizo a los etíopes delante de Asa y delante de Judá; y huyeron los etíopes. |
su territorio se extendió desde Sidón, en dirección de Guerar, hasta Gaza; luego en dirección de Sodoma, Gomorra, Adama y Seboín, hasta Lesa.
Se adueñaron de sus ganados: 50.000 camellos, 250.000 ovejas, 2.000 asnos y 100.000 personas;
con 1.200 carros, 60.000 caballos, seguidos de un ejército ingente, integrado por libios, suquíes y etíopes, que venían con él de Egipto.
Los de Judá lanzaron el grito de guerra; y mientras éste se prolongaba, Dios derrotó a Jeroboán y a Israel ante Abías y Judá.
Aquel día ofrecieron en sacrificio al Señor 700 toros y 7.000 ovejas del botín que habían traído.
Tan pronto como comenzó el canto de júbilo y alabanza, el Señor suscitó la confusión entre los amonitas, los moabitas y los de las montañas de Seír, que venían a atacar a Judá, y se enfrentaron unos contra otros.
Tú, oh Dios, que nos has rechazado y no sales ya con nuestras tropas.
El mismo día en que se cumplieron los cuatrocientos treinta años, todos los ejércitos del Señor salieron de Egipto.
Aquel mismo día el Señor sacó a los israelitas del país de Egipto por escuadras.
Frenó las ruedas de los carros, haciéndolos avanzar pesadamente. Los egipcios se dijeron: 'Huyamos de los israelitas, porque el Señor combate por ellos contra los egipcios'.
¿No sois para mí como etíopes, israelitas?, dice el Señor. ¿No saqué a Israel de Egipto, a los filisteos de Creta y a los sirios de Quir?
¡Demos gracias a Dios que nos da esta victoria por medio de nuestro Señor Jesucristo!
El Señor pondrá en fuga delante de ti a todos los enemigos que se alcen contra ti.
Ved ahora que soy yo, / que soy el único, / y que no hay Dios alguno más que yo. / Soy yo el dueño de la muerte y de la vida. / Yo hiero y yo curo. No hay nadie que se libre de mi mano.
El Señor los dispersó ante Israel y les infligió una gran derrota en Gabaón; los persiguió en dirección de la bajada de Bejorón y los derrotó hasta Azeca y hasta Maqueda.