dad gloria al nombre del Señor. Traed ofrendas y entrad en su presencia, adorad al Señor en el atrio sagrado.
2 Crónicas 11:16 - Biblia Martin Nieto Los fieles seguidores del Señor, de todas las tribus de Israel, siguieron el ejemplo de los sacerdotes y levitas, y se fueron a Jerusalén para ofrecer sacrificios al Señor, Dios de sus padres. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Tras aquellos acudieron también de todas las tribus de Israel los que habían puesto su corazón en buscar a Jehová Dios de Israel; y vinieron a Jerusalén para ofrecer sacrificios a Jehová, el Dios de sus padres. Biblia Nueva Traducción Viviente De todas las tribus de Israel, los que querían adorar de corazón al Señor, Dios de Israel, siguieron a los levitas a Jerusalén, donde podían ofrecer sacrificios al Señor, Dios de sus antepasados. Biblia Católica (Latinoamericana) Tras ellos vinieron a Jerusalén, para ofrecer sacrificios a Yavé, el Dios de sus padres, aquéllos de entre todas las tribus de Israel que buscaban sinceramente a Yavé, el Dios de Israel;' La Biblia Textual 3a Edicion Sin embargo, aquellos de entre todas las tribus de Israel que habían puesto su corazón para buscar a YHVH, Dios de Israel, los siguieron° a Jerusalem para ofrecer sacrificios a YHVH, el Dios de sus padres. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Y tras de ellos se fue a Jerusalén gente de todas las tribus de Israel que habían decidido en su corazón buscar a Yahveh, Dios de Israel, para poder ofrecer sacrificios a Yahveh, el Dios de sus padres. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Tras aquéllos acudieron también de todas las tribus de Israel los que habían puesto su corazón en buscar a Jehová, el Dios de Israel; y se vinieron a Jerusalén para ofrecer sacrificios a Jehová, el Dios de sus padres. |
dad gloria al nombre del Señor. Traed ofrendas y entrad en su presencia, adorad al Señor en el atrio sagrado.
Por eso dijo David: 'Ésta será la casa del Señor Dios, y aquí estará el altar de los holocaustos de Israel'.
Poned, pues, vuestro corazón y vuestra alma al servicio del Señor, vuestro Dios. Aprestaos y edificad el santuario del Señor, vuestro Dios, para trasladar al templo edificado al nombre del Señor el arca de la alianza del Señor y los utensilios consagrados a Dios'.
De esta manera consolidaron el reino de Judá y reforzaron a Roboán, hijo de Salomón, los tres años que éste siguió el camino de David y Salomón.
Se comprometieron con un pacto a buscar al Señor, Dios de sus padres, con todo su corazón y toda su alma.
Todo Judá estaba contento por el juramento que acababan de hacer con todo el corazón; con toda su buena voluntad habían buscado al Señor, y él se había dejado encontrar por ellos, y les había concedido la paz en todas sus fronteras.
Convocó a todo Judá y Benjamín, y a los de Efraín, Manasés y Simeón, que habitaban entre ellos, pues muchos de los de Israel se habían pasado al lado de Asá al ver que el Señor, su Dios, estaba con él.
No obstante, algo bueno hay en ti, pues has destruido las imágenes de Aserá y buscas a Dios de corazón'.
Josafat, atemorizado, recurrió al Señor y promulgó ayuno en todo Judá.
Todos se reunieron para invocar al Señor; de todas las ciudades de Judá vinieron a implorar el auxilio del Señor.
Sólo algunos de Aser, Manasés y Zabulón se humillaron y fueron a Jerusalén.
Los hombres del pueblo son un soplo, la gente ilustre, una mentira; cuando se los pone en la balanza, todos juntos pesan menos que un soplo.
Pero los que no hicieron caso de la palabra del Señor dejaron sus siervos y ganados en el campo.
'Pues bien -respondieron-, Daniel, ese deportado de Judá, no hace caso ni de ti, oh rey, ni de la prohibición que has firmado, sino que tres veces al día hace su oración'.
Se alimentan del pecado de mi pueblo, están hambrientos de su iniquidad.
Ahora, esto dice el Señor todopoderoso: Reflexionad sobre lo que os pasa:
Los habitantes de una ciudad irán a otra diciendo: Vamos a apaciguar al Señor, a buscar al Señor todopoderoso. Yo también voy.
Al llegar y ver la gracia de Dios, se llenó de alegría y exhortaba a todos a perseverar con un corazón firme, fieles al Señor,
y llevaréis al lugar que el Señor, vuestro Dios, haya elegido para hacer habitar en él su nombre, todo lo que yo os prescribo: vuestros holocaustos y vuestros sacrificios, vuestros diezmos y vuestras contribuciones y todas las cosas selectas que hayáis prometido al Señor.
'Grabad en vuestro corazón todas las palabras que hoy pongo como testigo contra vosotros y enseñádselas a vuestros hijos para que pongan en práctica todas las disposiciones de esta ley.
Si vuestra heredad os parece impura, pasad a la tierra del Señor, donde él ha establecido su morada, y habitad en medio de nosotros; pero no os rebeléis contra el Señor levantando un altar rival del altar del Señor, nuestro Dios.