Tu ofrenda a Dios, que sea la acción de gracias, cumple tus promesas al altísimo,
2 Corintios 4:15 - Biblia Martin Nieto Porque todo es por vosotros, para que la gracia, cada vez más abundante, multiplique la acción de gracias para gloria de Dios. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Porque todas estas cosas padecemos por amor a vosotros, para que abundando la gracia por medio de muchos, la acción de gracias sobreabunde para gloria de Dios. Biblia Nueva Traducción Viviente Todo esto es para beneficio de ustedes, y a medida que la gracia de Dios alcance a más y más personas, habrá abundante acción de gracias, y Dios recibirá más y más gloria. Biblia Católica (Latinoamericana) Y todo esto es para bien de ustedes; los favores de Dios se van multiplicando, y también se irá ampliando cada día más la acción de gracias que tantas personas rinden a Dios para gloria suya. La Biblia Textual 3a Edicion Porque todas las cosas son para vuestro bien, para que abundando la gracia por medio de muchos, la acción de gracias sobreabunde para la gloria de Dios. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Todo esto es por vosotros, a fin de que cuanto mayor sera el número de los que reciben la gracia, mayor sea el agradecimiento para gloria de Dios. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Porque todas las cosas son hechas por amor a vosotros, para que la abundante gracia, mediante la acción de gracias de muchos, redunde para la gloria de Dios. |
Tu ofrenda a Dios, que sea la acción de gracias, cumple tus promesas al altísimo,
el que me ofrece la acción de gracias, ése me honra y toma el camino en el que encuentra la salvación de Dios'.
Y sabemos que Dios ordena todas las cosas para bien de los que le aman, de los que han sido elegidos según su designio.
Libre, de hecho, como estoy de todos, me hago esclavo de todos para ganarlos a todos.
con la ayuda de vuestra oración; si muchos piden a Dios por nosotros, muchos le darán gracias por los favores que nos concede.
además fue elegido por las iglesias como compañero de nuestro viaje para esta obra de caridad, a la que nos consagramos para gloria del Señor y en prueba de nuestra buena voluntad.
Ahora me alegro de sufrir por vosotros, y por mi parte completo en mi carne lo que falta a las tribulaciones de Cristo por su cuerpo, que es la Iglesia,
Todo lo soporto por los elegidos, para que también ellos alcancen la salvación que tenemos en Cristo Jesús y la gloria eterna.
Vosotros, por el contrario, sois linaje escogido, sacerdocio real, nación consagrada, pueblo de su propiedad, para anunciar las grandezas del que os ha llamado de las tinieblas a su luz maravillosa,
el que tenga el don de la palabra, que use de él como el que comunica palabras de Dios; el que presta un servicio que lo haga como mandatario de Dios de manera que en todo sea Dios glorificado por Jesucristo al cual se debe la gloria y el poder por los siglos de los siglos. Amén.