el pan que le da fuerzas, y el vino que le alegra el corazón y hace brillar su rostro más que el mismo aceite.
1 Timoteo 5:23 - Biblia Martin Nieto No bebas agua sola, mézclala con un poco de vino, por tu mal de estómago y tus frecuentes indisposiciones. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Ya no bebas agua, sino usa de un poco de vino por causa de tu estómago y de tus frecuentes enfermedades. Biblia Nueva Traducción Viviente No bebas agua solamente. Deberías tomar un poco de vino por el bien de tu estómago, ya que te enfermas muy seguido. Biblia Católica (Latinoamericana) No sigas bebiendo agua sola. Toma un poco de vino a causa de tu estómago y de tus frecuentes malestares. La Biblia Textual 3a Edicion Ya no bebas agua, sino usa un poco de vino por causa de tu estómago y de tus frecuentes enfermedades. Biblia Serafín de Ausejo 1975 No bebas ya sólo agua, toma también un poco de vino a causa de tu estómago y de tus frecuentes dolencias. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Ya no bebas agua, sino usa de un poco de vino por causa de tu estómago y de tus frecuentes enfermedades. |
el pan que le da fuerzas, y el vino que le alegra el corazón y hace brillar su rostro más que el mismo aceite.
Ningún sacerdote beberá vino el día en que tenga que entrar en el atrio a oficiar.
Cuando Silas y Timoteo llegaron de Macedonia, Pablo se entregó por completo a la predicación de la palabra, proclamando ante los judíos que Jesús era el mesías.
No bebáis vino hasta emborracharos, pues eso lleva al desenfreno; al contrario, llenaos del Espíritu Santo
no debe emborracharse, ni ser amigo de peleas; debe ser ecuánime, pacífico y desinteresado;
Asimismo, que los diáconos sean hombres dignos, formales, no aficionados a la bebida y a los negocios sucios.
Pues todo lo que Dios ha creado es bueno, y nada se debe rechazar, sino recibirlo con agradecimiento,
Es necesario que el obispo sea irreprochable, como administrador que es de la casa de Dios; no debe ser arrogante, ni colérico, ni borracho, ni amigo de peleas ni de negocios sucios;
que las ancianas, igualmente, observen una conducta digna de personas santas; que no sean calumniadoras, ni dadas a la bebida, sino capaces de instruir en el bien,