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1 Tesalonicenses 2:10 - Biblia Martin Nieto

Vosotros sois testigos, y también Dios, de que nos comportamos con vosotros, los creyentes, de una manera noble, justa e irreprochable.

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Biblia Reina Valera 1960

Vosotros sois testigos, y Dios también, de cuán santa, justa e irreprensiblemente nos comportamos con vosotros los creyentes;

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Biblia Nueva Traducción Viviente

Ustedes mismos son nuestros testigos —al igual que Dios— de que fuimos consagrados, sinceros e intachables con todos ustedes, los creyentes.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

Ustedes son testigos, y Dios también, de que nos portamos como santos, como hombres buenos y correctos respecto de todos ustedes que ahora creen.

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La Biblia Textual 3a Edicion

Vosotros sois testigos, y Dios, de cuán santa, justa, e intachablemente nos comportamos° con vosotros los que creéis;

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

Vosotros sois testigos -y el mismo Dios lo es- de cuán religiosa, recta e irreprochable fue nuestra conducta para con vosotros, los creyentes.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Vosotros sois testigos, y también Dios, de cuán santa y justa e irreprensiblemente nos condujimos con vosotros que creísteis;

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1 Tesalonicenses 2:10
26 Tagairtí Cros  

¿Acaso se devuelve mal por bien? Pues están cavando una fosa para mí. Recuerda cómo me he presentado ante ti para hablarte en favor suyo y alejar de ellos tu furor.


Moisés, preso de gran indignación, dijo al Señor: 'No hagas caso de su ofrenda. Ni un asno he tomado yo de ellos; a ninguno de ellos he perjudicado'.


Nosotros estamos aquí en justicia, porque recibimos lo que merecen nuestras fechorías; pero éste no ha hecho nada malo'.


Cuando llegaron, les dijo: 'Vosotros sabéis cómo me he portado con vosotros todo el tiempo desde el primer día que entré en Asia,


Por lo cual os declaro en el día de hoy que tengo la conciencia limpia respecto a todos vosotros,


Por tanto, yo me esfuerzo por tener una conciencia intachable para con Dios y para con los hombres.


Nos sentimos orgullosos de que nuestra conciencia nos asegure que nos hemos comportado con todo el mundo, y especialmente con vosotros, con la sencillez y la sinceridad que Dios da, y no por la sabiduría humana, sino por la gracia de Dios.


¿Por qué? ¿Porque no os quiero? Dios sabe lo que os quiero.


Dios, y padre de Jesús, el Señor, eternamente bendito, sabe que no miento.


Rechazamos la desvergüenza y la hipocresía, no procedemos con astucia ni falsificamos la palabra de Dios. Decimos siempre la verdad, y esto es nuestra recomendación a toda conciencia humana delante de Dios.


Sabiendo que debemos respetar al Señor, tratamos de convencer a los hombres, pues somos bien conocidos de Dios, y espero que lo seamos también de vuestras conciencias.


Escuchadme. A nadie hemos hecho daño, a nadie hemos arruinado, a nadie hemos explotado.


Porque nuestro mensaje evangélico no os fue transmitido solamente con palabras, sino también con obras portentosas bajo la acción del Espíritu Santo y, por parte nuestra, con una profunda entrega. En efecto, vosotros sabéis cuál fue nuestra actuación entre vosotros para vuestro bien.


Nunca, como sabéis y Dios es testigo de ello, fueron móviles nuestros la adulación y la avaricia;


Bien sabéis lo que debéis hacer para seguir nuestro ejemplo. No vivimos entre vosotros sin trabajar,


Que nadie te menosprecie por ser joven; debes ser, más bien, ejemplo para los creyentes, en el modo de hablar, en el comportamiento, en el amor, en la fe, en la honestidad.


Pero tú me has seguido de cerca en la doctrina, en mi conducta, en mis planes, en la fe, en la paciencia, en el amor, en la constancia,


no como dictadores, sino como modelos para el rebaño.