Los que pasaban por allí lo insultaban moviendo la cabeza y diciendo: '¡Bah! ¡Tú, que destruías el templo y lo edificabas en tres días,
1 Samuel 25:14 - Biblia Martin Nieto Uno de los jóvenes dio la noticia a Abigaíl, mujer de Nabal: 'David ha enviado desde el desierto unos mensajeros para saludar a nuestro amo, y él los ha despreciado. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Pero uno de los criados dio aviso a Abigail mujer de Nabal, diciendo: He aquí David envió mensajeros del desierto que saludasen a nuestro amo, y él los ha zaherido. Biblia Nueva Traducción Viviente Entre tanto, uno de los siervos de Nabal fue a decirle a Abigail: «David envió mensajeros desde el desierto para saludar a nuestro amo, pero él les respondió con insultos. Biblia Católica (Latinoamericana) Uno de sus mozos le comunicó a Abigaíl, la mujer de Nabal, lo que había pasado, diciéndole: 'David envió desde el desierto unos mensajeros para que saludaran a nuestro patrón, pero éste los mandó de vuelta. La Biblia Textual 3a Edicion Pero uno de los muchachos informó a Abigail, mujer de Nabal, diciendo: He aquí, David envió mensajeros desde el desierto para saludar a nuestro amo, y él los despreció. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Uno de los criados había dado este aviso a Abigail, esposa de Nabal: 'Mira que David ha enviado mensajeros desde el desierto para saludar a nuestro amo, pero él los ha despachado de mala manera. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y uno de los criados dio aviso a Abigail, esposa de Nabal, diciendo: He aquí David envió mensajeros desde el desierto que saludasen a nuestro amo, y él los ha zaherido. |
Los que pasaban por allí lo insultaban moviendo la cabeza y diciendo: '¡Bah! ¡Tú, que destruías el templo y lo edificabas en tres días,
Cuando terminaba de ofrecer el holocausto, llegó Samuel, y Saúl salió a su encuentro para saludarle.
Samuel llegó donde estaba Saúl, el cual le dijo: '¡El Señor te bendiga! ¡He cumplido la orden del Señor!'.
Este hombre se llamaba Nabal, y su mujer, Abigaíl. La mujer era muy sensata y muy hermosa; el hombre, por el contrario, era duro y malo; era calebita.