Cuando terminó de profetizar, entró en su casa.
Y cesó de profetizar, y llegó al lugar alto.
Cuando Saúl terminó de profetizar, subió al lugar de adoración.
Después que terminó de profetizar, regresó a su casa.
Cesó de profetizar, y llegando al lugar alto,
Cuando cesó el arrebato del trance se fue a casa.
Y cuando terminó de profetizar vino al lugar alto.
Uno de ellos dijo: '¿Y quién es su padre?'. Por eso quedó como proverbio: 'También Saúl anda entre los profetas'.
Un tío suyo les dijo a él y al mozo: '¿Dónde habéis ido?'. Él respondió: 'A buscar las asnas; y como no las veíamos, fuimos a Samuel'.