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1 Reyes 18:28 - Biblia Martin Nieto

Ellos, entonces, gritaban más fuerte, y según su costumbre, se hacían cortes con espadas y lanzas, hasta chorrear sangre por su cuerpo.

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Biblia Reina Valera 1960

Y ellos clamaban a grandes voces, y se sajaban con cuchillos y con lancetas conforme a su costumbre, hasta chorrear la sangre sobre ellos.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

Así que ellos gritaron más fuerte y, como acostumbraban hacer, se cortaron con cuchillos y espadas hasta quedar bañados en sangre.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

Gritaban pues cada vez más fuerte mientras se hacían, según sus costumbres, incisiones con cuchillos para que corriera la sangre.

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La Biblia Textual 3a Edicion

Y ellos clamaban con fuerza, y se sajaban según su costumbre con cuchillos y lancetas, hasta que la sangre brotaba de ellos.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

Y ellos seguían gritando más fuerte, al par que, conforme a su costumbre, se hacían incisiones con cuchillos y lancetas, hasta chorrearles la sangre.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Y ellos clamaban a grandes voces, y se sajaban con cuchillos y con lancetas conforme a su costumbre, hasta chorrear la sangre sobre ellos.

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1 Reyes 18:28
9 Tagairtí Cros  

Cuando fue mediodía, Elías comenzó a burlarse de ellos, diciendo: '¡Gritad más fuerte, pues es dios! Pero está cavilando, o retirado, o se encontrará de viaje; tal vez esté durmiendo y tenga que despertarse'.


Y con lo restante se hace su dios, su ídolo, ante el cual se prosterna y se inclina y al que suplica diciendo: '¡Sálvame, pues tú eres mi dios!'.


Gaza está rapada al cero, Ascalón está en silencio y tú, Asdod, resto de los anaquitas, ¿hasta cuándo te harás cortaduras?


No os haréis cortes en la carne por un muerto ni os haréis tatuajes: yo, el Señor.


¿Aceptará el Señor miles de carneros y millones de ríos de aceite? ¿Ofreceré mi primogénito por mi delito, el fruto de mis entrañas por mi propio pecado?


Y si alguno le pregunta: '¿Qué cicatrices son esas que hay en tus manos?', él responderá: 'Las que me hicieron en casa de mis amantes'.


Se pasaba el día y la noche entre los sepulcros y en los montes gritando y golpeándose con piedras.


y muchas veces lo tira al fuego y al agua para matarlo. Si puedes hacer algo, apiádate de nosotros y ayúdanos'.


Vosotros sois los hijos del Señor, vuestro Dios. No os haréis cortaduras ni os raparéis el pelo de la frente por un muerto.