Cuando fue mediodía, Elías comenzó a burlarse de ellos, diciendo: '¡Gritad más fuerte, pues es dios! Pero está cavilando, o retirado, o se encontrará de viaje; tal vez esté durmiendo y tenga que despertarse'.
1 Reyes 18:28 - Biblia Martin Nieto Ellos, entonces, gritaban más fuerte, y según su costumbre, se hacían cortes con espadas y lanzas, hasta chorrear sangre por su cuerpo. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y ellos clamaban a grandes voces, y se sajaban con cuchillos y con lancetas conforme a su costumbre, hasta chorrear la sangre sobre ellos. Biblia Nueva Traducción Viviente Así que ellos gritaron más fuerte y, como acostumbraban hacer, se cortaron con cuchillos y espadas hasta quedar bañados en sangre. Biblia Católica (Latinoamericana) Gritaban pues cada vez más fuerte mientras se hacían, según sus costumbres, incisiones con cuchillos para que corriera la sangre. La Biblia Textual 3a Edicion Y ellos clamaban con fuerza, y se sajaban según su costumbre con cuchillos y lancetas, hasta que la sangre brotaba de ellos. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Y ellos seguían gritando más fuerte, al par que, conforme a su costumbre, se hacían incisiones con cuchillos y lancetas, hasta chorrearles la sangre. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y ellos clamaban a grandes voces, y se sajaban con cuchillos y con lancetas conforme a su costumbre, hasta chorrear la sangre sobre ellos. |
Cuando fue mediodía, Elías comenzó a burlarse de ellos, diciendo: '¡Gritad más fuerte, pues es dios! Pero está cavilando, o retirado, o se encontrará de viaje; tal vez esté durmiendo y tenga que despertarse'.
Y con lo restante se hace su dios, su ídolo, ante el cual se prosterna y se inclina y al que suplica diciendo: '¡Sálvame, pues tú eres mi dios!'.
Gaza está rapada al cero, Ascalón está en silencio y tú, Asdod, resto de los anaquitas, ¿hasta cuándo te harás cortaduras?
No os haréis cortes en la carne por un muerto ni os haréis tatuajes: yo, el Señor.
¿Aceptará el Señor miles de carneros y millones de ríos de aceite? ¿Ofreceré mi primogénito por mi delito, el fruto de mis entrañas por mi propio pecado?
Y si alguno le pregunta: '¿Qué cicatrices son esas que hay en tus manos?', él responderá: 'Las que me hicieron en casa de mis amantes'.
Se pasaba el día y la noche entre los sepulcros y en los montes gritando y golpeándose con piedras.
y muchas veces lo tira al fuego y al agua para matarlo. Si puedes hacer algo, apiádate de nosotros y ayúdanos'.
Vosotros sois los hijos del Señor, vuestro Dios. No os haréis cortaduras ni os raparéis el pelo de la frente por un muerto.