1 Reyes 17:24 - Biblia Martin Nieto La mujer dijo a Elías: 'Ahora sí reconozco que eres un hombre de Dios y que la palabra del Señor en tu boca es verdad'. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Entonces la mujer dijo a Elías: Ahora conozco que tú eres varón de Dios, y que la palabra de Jehová es verdad en tu boca. Biblia Nueva Traducción Viviente Entonces la mujer le dijo a Elías: —Ahora estoy convencida de que usted es un hombre de Dios y que de verdad el Señor habla por medio de usted. Biblia Católica (Latinoamericana) Entonces la mujer dijo a Elías: '¡Ahora sé que tú eres un hombre de Dios y cuando tú dices la palabra de Dios, es verdad!' La Biblia Textual 3a Edicion Y la mujer dijo a Elías: ¡Ahora sé que tú eres varón de Dios, y que la palabra de YHVH es verdad en tu boca! Biblia Serafín de Ausejo 1975 La mujer dijo entonces a Elías: 'Ahora reconozco que eres un varón de Dios, y que la palabra de Yahveh está verdaderamente en tu boca'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Entonces la mujer dijo a Elías: Ahora conozco que tú eres varón de Dios, y que la palabra de Jehová es verdad en tu boca. |
Elías tomó al niño, lo bajó del aposento superior de la casa y lo entregó a su madre, diciendo: '¡Mira, tu hijo está vivo!'.
Eliseo le dijo: 'El año próximo, por estas fechas, tendrás en brazos un hijo'. Ella respondió: 'No, señor mío, hombre de Dios, no engañes a tu sierva'.
Aquella mujer dijo a su marido: 'Mira, me he dado cuenta de que es un hombre de Dios, un santo, ese que pasa siempre por nuestra casa.
ohélet procuró encontrar dichos agradables y escribir rectamente sentencias verdaderas.
y me alegro por vosotros de no haber estado allí, para que creáis. Vamos a verlo'.
Yo bien sabía que siempre me escuchas; pero lo he dicho por la gente que me rodea, para que crean que tú me has enviado'.
Si no hubiera hecho ante ellos obras que nadie ha hecho, no tendrían culpa. Pero han visto esas obras y, a pesar de todo, me odian a mí y a mi Padre.
Ahora conocemos que lo sabes todo y nadie necesita preguntarte; por eso creemos que has salido de Dios'.
Así, en Caná de Galilea, Jesús comenzó sus milagros, manifestó su gloria y sus discípulos creyeron en él.
Una noche fue a ver a Jesús y le dijo: 'Maestro, sabemos que Dios te ha enviado para enseñarnos, porque nadie puede hacer los milagros que tú haces si no está Dios con él'.
Por todo ello damos continuamente gracias a Dios: porque, al recibir la palabra de Dios que os predicamos, la abrazasteis no como palabra de hombre, sino como lo que es en verdad, la palabra de Dios, que permanece vitalmente activa en vosotros, los creyentes.
No os he escrito porque no conozcáis la verdad, sino porque la conocéis y sabéis que ninguna mentira puede proceder de la verdad.