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1 Crónicas 9:26 - Biblia Martin Nieto

En cambio, los cuatro jefes de los porteros que permanecían allí siempre eran levitas y tenían a su cargo las cámaras y tesoros del templo de Dios.

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Biblia Reina Valera 1960

Porque cuatro principales de los porteros levitas estaban en el oficio, y tenían a su cargo las cámaras y los tesoros de la casa de Dios.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

Los cuatro porteros principales, todos levitas, eran funcionarios de confianza, porque eran responsables de las habitaciones y de los tesoros de la casa de Dios.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

porque los cuatro jefes de los porteros eran permanentes; algunos levitas estaban al cuidado de las cámaras y de los tesoros de la Casa de Dios.

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La Biblia Textual 3a Edicion

Porque los cuatro porteros principales, que eran levitas, estaban en servicio permanente a cargo de las cámaras y de los tesoros de la Casa de Dios.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

pero los cuatro jefes de los porteros estaban de servicio permanente. Había levitas encargados de las cámaras y de los tesoros del templo de Dios.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Porque cuatro principales de los porteros levitas estaban en el oficio, y tenían cargo de las cámaras, y de los tesoros de la casa de Dios.

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1 Crónicas 9:26
9 Tagairtí Cros  

Fueron y gritaron a los centinelas de la puerta de la ciudad y les comunicaron la noticia de esta manera: 'Hemos entrado en el campamento de los sirios y allí no hay nadie, ni se oye nada. No se ven más que caballos atados, asnos atados y tiendas intactas'.


Sus hermanos, que seguían en sus aldeas, venían a ayudarlos periódicamente por turno de siete días.


Pasaban la noche en los alrededores de la casa de Dios, pues estaban encargados de custodiarla y de abrir sus puertas cada mañana.


había puesto a disposición de éste un local grande en el que antes se depositaban las ofrendas, el incienso, los utensilios, los diezmos del grano, del vino y del aceite, es decir, lo que les correspondía a los levitas, a los cantores y a los porteros y la porción debida a los sacerdotes.


'Vete donde la comunidad de los recabitas y háblales; llévalos luego al templo del Señor, a una de las salas, y dales a beber vino'.


Me llevó después al atrio exterior. También allí había salas y un enlosado alrededor del atrio; treinta salas daban al enlosado.