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1 Crónicas 20:8 - Biblia Martin Nieto

Estos gigantes eran descendientes de los gigantes de Gat, y cayeron en manos de David y sus hombres.

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Biblia Reina Valera 1960

Estos eran descendientes de los gigantes en Gat, los cuales cayeron por mano de David y de sus siervos.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

Estos filisteos eran descendientes de los gigantes de Gat, pero David y sus guerreros los mataron.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

Estos son los que descendían de Rafá de Gat, que murieron en manos de David y de sus tropas.

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La Biblia Textual 3a Edicion

Éstos fueron los descendientes de Rafaim en Gat, los cuales cayeron por mano de David y por mano de sus siervos.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

Estos hombres eran descendientes de Rafá, de Gat, y sucumbieron a mano de David y de sus servidores.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Estos fueron hijos del gigante de Gat, los cuales cayeron por mano de David y de sus siervos.

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1 Crónicas 20:8
8 Tagairtí Cros  

Un gigante, descendiente de Rafá, que tenía una lanza que pesaba unos treinta kilos y ceñía una espada nueva, decía que iba a matar a David.


Estos cuatro gigantes eran descendientes de los gigantes de Gat, y cayeron en manos de David y de sus hombres.


Él desafió a Israel, y Jonatán, hijo de Simeá, hermano de David, lo mató.


Satán se levantó contra Israel e indujo a David a hacer el censo de Israel.


También he visto bajo el sol que ni es de los veloces la carrera, ni de los valientes el combate, ni de los sabios el pan, ni de los inteligentes la riqueza, ni de los instruidos la estima, porque el tiempo y la mala suerte alcanzan a todos.


quien quiera presumir, que presuma de esto: De tener inteligencia y conocerme, porque yo soy el Señor, que hago misericordia, derecho y justicia en la tierra. Sí, esto es lo que me agrada -dice el Señor-.


¿Qué más podremos decir? Si Dios está con nosotros, ¿quién estará contra nosotros?


Dame, pues, esta montaña que el Señor me prometió aquel día, como tú mismo lo oíste. Allí están los anaquitas, y hay ciudades grandes y fortificadas. Si el Señor está conmigo, yo los echaré de allí, como él prometió'.