Después de esto, murió el rey de los amonitas y le sucedió su hijo Janún.
1 Crónicas 19:19 - Biblia Martin Nieto Cuando los aliados de Hadadézer se vieron derrotados por Israel, firmaron la paz con David y le quedaron sometidos. Desde entonces los sirios no se atrevieron a volver a ayudar más a los amonitas. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y viendo los siervos de Hadad-ezer que habían caído delante de Israel, concertaron paz con David, y fueron sus siervos; y el pueblo sirio nunca más quiso ayudar a los hijos de Amón. Biblia Nueva Traducción Viviente Cuando los aliados de Hadad-ezer vieron que Israel los había derrotado, se rindieron a David y se convirtieron en sus súbditos. Después de esto, los arameos nunca más quisieron ayudar a los amonitas. Biblia Católica (Latinoamericana) Cuando los hombres de Hadadezer vieron que Israel los derrotó, hicieron la paz con David y le quedaron sometidos. En adelante, los arameos ya no se atrevieron a seguir ayudando a los amonitas. La Biblia Textual 3a Edicion Cuando los siervos de Hadad-ezer vieron que habían caído delante de Israel, concertaron paz con David y le quedaron sometidos; y los sirios no quisieron ayudar más a los hijos de Amón. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Entonces los súbditos de Hadadézer, viéndose derrotados por Israel, concertaron la paz con David y le quedaron sometidos. Desde entonces, los arameos ya no se atrevieron a prestar auxilio a los amonitas. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y cuando los siervos de Hadad-ezer vieron que habían caído delante de Israel, concertaron paz con David, y fueron sus siervos; y los sirios nunca más quisieron ayudar a los hijos de Amón. |
Después de esto, murió el rey de los amonitas y le sucedió su hijo Janún.
Cuando los reyes aliados de Hadadézer se vieron derrotados por Israel, firmaron la paz con Israel y le quedaron sometidos. Y en adelante los sirios no se atrevieron a volver a ayudar a los amonitas.
Ben Hadad, rey de Siria, reunió todo su ejército y, acompañado de treinta y dos reyes con carros y caballos, fue a sitiar Samaría y la atacó.
Cuando Ben Hadad se enteró de esta respuesta, estaba con los reyes, bebiendo en las tiendas, y mandó a sus súbditos: '¡A formar!'. Y formaron contra la ciudad.
La fama de David se extendió por toda la región, y el Señor hizo que todos los pueblos le tuvieran miedo.
Éstos huyeron ante Israel y David les mató siete mil caballos de tiro y cuarenta mil hombres. Cayó también Sofac, el general.
Al año siguiente, al tiempo en que suelen salir los reyes de campaña, Joab, a la cabeza de un gran ejército, marchó contra la tierra de los amonitas y la devastó. Luego puso asedio a Rabá, mientras David estaba en Jerusalén. Joab se apoderó de Rabá y la destruyó.
Me hiciste escapar de las sediciones de los pueblos, me pusiste a la cabeza de naciones, un pueblo que yo no conocía, ahora me sirve.