Eliseo dejó los bueyes, corrió detrás de Elías y le dijo: —Déjame darle un beso a mi padre y a mi madre para despedirme, y después te seguiré. Elías le contestó: —Está bien, ve a despedirte. Pero recuerda lo que he hecho contigo.
Lucas 9:59 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual Después Jesús le dijo a otro: —¡Sígueme! Pero él respondió: —Señor, primero déjame ir a enterrar a mi padre. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y dijo a otro: Sígueme. Él le dijo: Señor, déjame que primero vaya y entierre a mi padre. Biblia Nueva Traducción Viviente Dijo a otro: —Ven, sígueme. El hombre aceptó, pero le dijo: —Señor, deja que primero regrese a casa y entierre a mi padre. Biblia Católica (Latinoamericana) Jesús dijo a otro: 'Sígueme'. El contestó: 'Señor, deja que me vaya y pueda primero enterrar a mi padre. La Biblia Textual 3a Edicion Y dijo a otro: ¡Sígueme! Pero él dijo: Señor, permíteme ir° primero a enterrar a mi padre. Biblia Serafín de Ausejo 1975 A otro le dijo: 'Sígueme'. Este respondió: 'Permíteme que vaya primero a enterrar a mi padre'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y dijo a otro: Sígueme. Y él dijo: Señor, déjame que primero vaya y entierre a mi padre. |
Eliseo dejó los bueyes, corrió detrás de Elías y le dijo: —Déjame darle un beso a mi padre y a mi madre para despedirme, y después te seguiré. Elías le contestó: —Está bien, ve a despedirte. Pero recuerda lo que he hecho contigo.
Luego Jesús les dijo a sus discípulos: «Si ustedes quieren ser mis discípulos, tienen que olvidarse de hacer su propia voluntad. Tienen que estar dispuestos a cargar su cruz y a hacer lo que yo les diga.
»Lo más importante es que reconozcan a Dios como único rey, y que hagan lo que él les pide. Dios les dará a su tiempo todo lo que necesiten.
Cuando Jesús salió de allí, vio a un hombre llamado Mateo, que estaba sentado cobrando impuestos para el gobierno de Roma. Entonces Jesús le dijo: «Sígueme». Mateo se levantó y lo siguió.
Jesús le dijo: —Lo importante es que tú vayas ahora mismo a anunciar las buenas noticias del reino de Dios. ¡Deja que los muertos entierren a sus muertos!