Bíobla ar líne

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An Bíobla ar fad Sean-Tiomna Tiomna Nua




Lucas 19:20 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual

»Después llegó otro empleado y dijo: “Señor, yo sé que usted es un hombre muy exigente, que pide hasta lo imposible. Por eso me dio miedo, así que envolví el dinero en un pañuelo y lo guardé. Aquí se lo devuelvo todo.”

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Taispeáin Interlinear Bible

Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

Vino otro, diciendo: Señor, aquí está tu mina, la cual he tenido guardada en un pañuelo;

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Biblia Nueva Traducción Viviente

»Pero el tercer siervo trajo solo la suma original y dijo: “Amo, escondí su dinero para protegerlo.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

Llegó el tercero y dijo: 'Señor, aquí tienes tu moneda. La he guardado envuelta en un pañuelo'

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La Biblia Textual 3a Edicion

Y el otro llegó, diciendo: Señor, aquí está tu mina, que tenía guardada en un pañuelo.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

Llegó luego el otro, que dijo: 'Señor, aquí está tu mina, que tenía guardada en un pañuelo;

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Y vino otro, diciendo: Señor, he aquí tu mina, la cual he tenido guardada en un pañuelo;

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Lucas 19:20
10 Tagairtí Cros  

»Por último, llegó el empleado que había recibido mil monedas, y dijo: “Señor, yo sabía que usted es un hombre muy exigente, que pide hasta lo imposible.


Por eso llamó a diez de sus empleados. A cada uno le dio cierta cantidad de dinero, y le dijo: “Haz negocios con este dinero, hasta que yo vuelva.”


El rey le dijo: “Tú serás gobernador de cinco ciudades.”


Cuando un árbol no produce buenos frutos, su dueño lo corta de raíz y lo quema. ¡Y Dios ya está listo para destruir a los que no hacen lo bueno!


Jesús continuó diciendo: «Ustedes dicen que yo soy su Señor y su dueño, pero no hacen lo que yo les ordeno.


Lázaro salió de la cueva, totalmente envuelto en las vendas de lino con que lo habían sepultado. Su cara estaba envuelta con un pañuelo. Por eso Jesús les dijo a los que estaban allí: «Quítenle todas las vendas, y déjenlo libre.»


y vio además que la tela que había servido para envolver la cabeza de Jesús ya no estaba con las vendas, sino que la habían enrollado y puesto aparte.


Si ustedes saben hacer lo bueno y no lo hacen, ya están pecando.