Bíobla ar líne

Fógraí


An Bíobla ar fad Sean-Tiomna Tiomna Nua




Levítico 17:2 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual

que les diera las siguientes instrucciones a los sacerdotes y a todos los israelitas:

Féach an chaibidil
Taispeáin Interlinear Bible

Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

Habla a Aarón y a sus hijos, y a todos los hijos de Israel, y diles: Esto es lo que ha mandado Jehová:

Féach an chaibidil

Biblia Nueva Traducción Viviente

«Da las siguientes instrucciones a Aarón, a sus hijos y a todo el pueblo de Israel. Esto es lo que el Señor ha ordenado.

Féach an chaibidil

Biblia Católica (Latinoamericana)

Habla a Aarón y a sus hijos y a todos los hijos de Israel y diles: Esta es la orden que ha dado Yavé:

Féach an chaibidil

La Biblia Textual 3a Edicion

Habla a Aarón, a sus hijos y a todos los hijos de Israel, y les dirás: Esta es la palabra que YHVH ha ordenado diciendo:

Féach an chaibidil

Biblia Serafín de Ausejo 1975

'Habla a Aarón, a sus hijos y a todos los israelitas, y diles: esto es lo que ha mandado Yahveh:

Féach an chaibidil

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Habla a Aarón y a sus hijos, y a todos los hijos de Israel, y diles: Esto es lo que ha mandado Jehová, diciendo:

Féach an chaibidil
Aistriúcháin eile



Levítico 17:2
4 Tagairtí Cros  

«Si un israelita piensa presentarme un toro, una oveja o una cabra como ofrenda, deberá matar el animal a la entrada del santuario. Si lo mata en cualquier otro lugar, dentro o fuera del campamento, comete un crimen, y deberá ser expulsado del país.


»Tengan cuidado de no llevar sus ofrendas a cualquier parte, sino solo al lugar que Dios elija de entre las tribus. Allí harán lo que les he ordenado hacer, y darán gracias por las abundantes cosechas que Dios les haya dado. Durante esa fiesta podrán comer de todo lo que hayan llevado. Todo el pueblo podrá participar, esté o no en condiciones de presentarse ante Dios. Lo único que no podrán comer es carne que aún tenga sangre; deben dejar que la sangre se escurra sobre el suelo. »Mientras ustedes vivan en sus ciudades, no deberán comer nada de lo que les corresponde de sus ofrendas, hasta llegar al lugar que Dios elija para poner su Santuario. No se olviden de compartir eso con los de la tribu de Leví que habiten en sus ciudades.