Bíobla ar líne

Fógraí


An Bíobla ar fad Sean-Tiomna Tiomna Nua




Números 29:20 - La Biblia Textual 3a Edicion

El tercer día, once becerros, dos carneros, catorce corderos añales sin defecto,

Féach an chaibidil
Taispeáin Interlinear Bible

Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

El día tercero, once becerros, dos carneros, catorce corderos de un año sin defecto;

Féach an chaibidil

Biblia Nueva Traducción Viviente

»El tercer día del festival, sacrifiquen once becerros, dos carneros y catorce corderos de un año, todos sin defecto.

Féach an chaibidil

Biblia Católica (Latinoamericana)

El día tercero, ofrcerán once novillos, dos carneros, catorce corderos de un año sin defecto,

Féach an chaibidil

Biblia Serafín de Ausejo 1975

El tercer día: once novillos, dos carneros y catorce corderos de un año, sin defecto.

Féach an chaibidil

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Y en el tercer día, once becerros, dos carneros, y catorce corderos de un año, sin defecto;

Féach an chaibidil

Biblia Traducción en Lenguaje Actual

»Además de las ofrendas diarias, del día tercero al séptimo de esa semana sacrificarán y quemarán la misma cantidad de animales sin defectos, y con cada uno de ellos me presentarán las ofrendas de harina amasada con aceite, según las cantidades que les he indicado. También me presentarán cada día, como sacrificio, un chivo para que yo, su Dios, les perdone sus pecados. »La única diferencia será con los toros: el tercer día me ofrecerán once toros, pero el cuarto día me ofrecerán diez; el quinto día, nueve; el sexto día, ocho; y el séptimo día, siete. Así es como me agradan estas ofrendas.

Féach an chaibidil
Aistriúcháin eile



Números 29:20
4 Tagairtí Cros  

El segundo día, doce becerros de la vacada, dos carneros, catorce corderos añales sin defecto,


y un macho cabrío como ofrenda por el pecado, además del holocausto continuo, su ofrenda vegetal y su libación.


con su ofrenda vegetal y sus libaciones para los becerros, los carneros y los corderos, según el número de ellos, conforme al decreto,


Estando ya la fiesta a la mitad, Jesús subió al templo y allí enseñaba.