León rugiente y oso hambriento es el gobernante que oprime a los necesitados.
Sofonías 3:3 - Nueva Biblia Española (1975) sus príncipes en ella eran leones rugiendo; sus jueces, lobos a la tarde, sin comer desde la mañana; Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Sus príncipes en medio de ella son leones rugientes; sus jueces, lobos nocturnos que no dejan hueso para la mañana. Biblia Nueva Traducción Viviente Sus líderes son como leones rugientes en cacería de sus víctimas. Sus jueces son como lobos voraces al anochecer, que para la mañana no han dejado rastro de su presa. Biblia Católica (Latinoamericana) Sus reyes en medio de ella son como leones que rugen; sus gobernantes son como lobos nocturnos que no guardan ni un hueso para el día siguiente. La Biblia Textual 3a Edicion Sus príncipes en medio de ella son leones rugientes; sus jueces, lobos nocturnos,° que no dejan hueso para la mañana. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Los príncipes que la habitan son leones rugientes; sus jueces son lobos de la noche que nada dejan por roer para mañana. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Sus príncipes en medio de ella son leones rugientes; sus jueces, lobos nocturnos que no dejan hueso para la mañana. |
León rugiente y oso hambriento es el gobernante que oprime a los necesitados.
tus jefes son bandidos, socios de ladrones: todos amigos de sobornos, en busca de regalos. No defienden al huérfano, no se encargan de la causa de la viuda.
Su rugido es de león, ruge como los cachorros, gruñe y atrapa la presa, la retiene, y nadie se la arranca.
Tú, en cambio, tienes ojos y corazón sólo para el lucro, para derramar sangre inocente, para el abuso y la opresión.
profetas y sacerdotes son unos impíos, hasta en mi templo encuentro maldades -oráculo del Señor- ;
A los dignatarios de Judá y Jerusalén, a los eunucos y sacerdotes, a todo el pueblo que pasó entre las mitades del novillo,
por eso los herirá un león de la selva, un lobo de la estepa los despedazará, una pantera acecha sus ciudades y arrebata al que sale, porque son muchas sus culpas y graves sus apostasías.
Ustedes, los que se han quedado en las ruinas, cometen abominaciones y profanan a la mujer del prójimo, ¿van a poseer la tierra?
Sus caballos son más veloces que panteras, más afilados que lobos esteparios. Sus jinetes brincan, sus jinetes vienen de lejos volando como rauda águila sobre la presa.