diciéndole: Ven conmigo y verás mi celo por el Señor. Y lo llevó en su carro.
Proverbios 27:2 - Nueva Biblia Española (1975) Que te alabe el extraño, y no tu boca; el desconocido, y no tus labios. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Alábete el extraño, y no tu propia boca; El ajeno, y no los labios tuyos. Biblia Nueva Traducción Viviente Que te alabe otro y no tu propia boca; que lo haga un desconocido, no tus propios labios. Biblia Católica (Latinoamericana) Otro puede hacer tu elogio, pero no tú; otro hablará, no tú. La Biblia Textual 3a Edicion Alábete el extraño y no tu propia boca, El ajeno, y no los labios tuyos. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Que te alabe otro y no tu boca; un extraño, y no tus labios. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Que te alaben otros, y no tu boca; el extranjero, y no tus labios. |
diciéndole: Ven conmigo y verás mi celo por el Señor. Y lo llevó en su carro.
Cierto que uno no se atreve a igualarse o a compararse con algunos de esos que se hacen su propio elogio, aunque ellos, a fuerza de tomarse por patrón de si mismos y de compararse consigo mismos, ya no coordinan.
pues quien se elogia a sí mismo no es ése el que está aprobado, sino aquél a quien elogia el Señor.
He sido un insensato, ustedes me obligaron. Hablar en favor mío debería ser cosa suya, pues, aunque yo no sea nadie, en nada soy menos que esos superapóstoles.