Ve a decir a mi siervo David: Así dice el Señor: '¿Eres tú quien me va a construir una casa para que habite en ella?
Proverbios 16:1 - Nueva Biblia Española (1975) El hombre se prepara por dentro, pero Dios le pone la respuesta en los labios. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Del hombre son las disposiciones del corazón; Mas de Jehová es la respuesta de la lengua. Biblia Nueva Traducción Viviente Podemos hacer nuestros propios planes, pero la respuesta correcta viene del Señor. Biblia Católica (Latinoamericana) El hombre propone, pero Yavé dispone. La Biblia Textual 3a Edicion Del hombre son las disposiciones del corazón, Pero de YHVH la respuesta de la lengua. Biblia Serafín de Ausejo 1975 El hombre propone en su corazón, pero es Yahveh quien da la respuesta. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Las disposiciones del corazón en el hombre, y la respuesta de la lengua, son de Jehová. |
Ve a decir a mi siervo David: Así dice el Señor: '¿Eres tú quien me va a construir una casa para que habite en ella?
Y cuando los comandantes de los carros vieron a Josafat, comentaron: ¡Aquél es el rey de Israel! Y se lanzaron contra él. Pero Josafat gritó, y el Señor vino en su ayuda, alejándolos de él.
Bendito sea el Señor, Dios de nuestros padres, que movió al rey a dotar el templo de Jerusalén
Señor, mantén tus oídos atentos a la oración de tu siervo y a la oración de tus siervos que están dispuestos a respetarte. Haz que tu siervo acierte y logre conmover a ese hombre. Yo era copero del rey,
El Señor reinará eternamente y los paganos desaparecerán de su tierra.
Háblale y ponle mis palabras en la boca. Yo estaré en tu boca y en la suya, y les enseñaré lo que tienen que hacer.
Respetar al Señor es escuela de sensatez, delante de la gloria va la humildad.
El Señor dirige los pasos del hombre, ¿cómo puede el hombre entender su camino?
El corazón del rey es una acequia en manos de Dios: la dirige a donde quiere.
Ya lo sé, Señor, que el hombre no es dueño de sus caminos, que nadie puede establecer su propio curso.
Doy gracias a Dios por haber puesto en el corazón de Tito el mismo aprecio por ustedes;
porque es Dios quien activa en ustedes ese querer y ese actuar que sobrepasan la buena voluntad.