las palanganas, cuchillos, aspersorios, bandejas, incensarios de oro puro, los quicios de oro para las puertas del camarín y de la nave.
Números 7:86 - Nueva Biblia Española (1975) doce bandejas de oro de cien gramos cada una (pesos del santuario) llenos de incienso; en total, mil doscientos gramos de oro; Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Las doce cucharas de oro llenas de incienso, de diez siclos cada cuchara, al siclo del santuario; todo el oro de las cucharas, ciento veinte siclos. Biblia Nueva Traducción Viviente Cada uno de los doce recipientes de oro, que contenían el incienso, pesaba ciento catorce gramos (calculado según el peso del siclo del santuario). El peso total del oro fue un kilo con cuatrocientos gramos. Biblia Católica (Latinoamericana) Las navetas de oro eran doce, llenas de incienso. Cada naveta era de diez siclos, en siclos del santuario. Los siclos de oro de las navetas sumaban en total ciento veinte. La Biblia Textual 3a Edicion Los doce recipientes de oro llenos de incienso eran de diez siclos cada recipiente, según el siclo del Santuario. El total del oro de los recipientes fue de ciento veinte siclos. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Doce cucharas de oro llenas de incienso, de diez siclos por cuchara, según el peso del siclo del santuario. El total de cucharas de oro fue de ciento veinte siclos. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Las doce cucharas de oro llenas de incienso, de diez siclos cada cuchara, al siclo del santuario; todo el oro de las cucharas, ciento veinte siclos. |
las palanganas, cuchillos, aspersorios, bandejas, incensarios de oro puro, los quicios de oro para las puertas del camarín y de la nave.
Harás también fuentes, bandejas, jarras y copas para la libación: todo de oro de ley.
Cada uno dará cinco gramos de plata (peso del templo, que vale veinte óbolos): el tributo al Señor será cinco gramos de plata.
doce fuentes de plata de mil trescientos gramos y doce aspersorios de plata de setecientos gramos, en total veinticuatro mil gramos de plata (pesos del santuario);
doce novillos, doce carneros y doce corderos añales con sus correspondientes ofrendas para holocaustos; doce machos cabríos para sacrificios de expiación;
Al entrar en la casa, vieron al niño con María, su madre, y cayendo de rodillas le rindieron homenaje; luego abrieron sus cofres y como regalos le ofrecieron oro, incienso y mirra.