Mira, con grandes sacrificios he ido reuniendo para el templo del Señor treinta y cuatro mil toneladas de oro, trescientas cuarenta mil toneladas de plata, bronce y hierro en cantidad incalculable; además, madera y piedra.
Números 7:85 - Nueva Biblia Española (1975) doce fuentes de plata de mil trescientos gramos y doce aspersorios de plata de setecientos gramos, en total veinticuatro mil gramos de plata (pesos del santuario); Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Cada plato de ciento treinta siclos, y cada jarro de setenta; toda la plata de la vajilla, dos mil cuatrocientos siclos, al siclo del santuario. Biblia Nueva Traducción Viviente Cada bandeja de plata pesaba un kilo y medio, y cada tazón de plata, ochocientos gramos. El peso total de la plata fue veintisiete kilos y medio (calculado según el peso del siclo del santuario). Biblia Católica (Latinoamericana) Cada fuente era de ciento treinta siclos, y cada platillo de setenta siclos. Los siclos de plata de todos estos objetos eran en total dos mil cuatrocientos, en siclos del Santuario. La Biblia Textual 3a Edicion Cada fuente era de ciento treinta siclos, cada tazón de setenta. El total de la plata de estos utensilios fue de dos mil cuatrocientos siclos, según el siclo del Santuario. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Cada fuente era de ciento treinta siclos; cada escudilla, de setenta siclos. La suma total de objetos de plata fue de dos mil cuatrocientos siclos, según el peso del siclo del santuario. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Cada plato de ciento treinta siclos, cada jarro de setenta; toda la plata de los vasos, dos mil cuatrocientos siclos, al siclo del santuario. |
Mira, con grandes sacrificios he ido reuniendo para el templo del Señor treinta y cuatro mil toneladas de oro, trescientas cuarenta mil toneladas de plata, bronce y hierro en cantidad incalculable; además, madera y piedra.
mil quintales de oro, de oro de Ofir; dos mil cuatrocientos quintales de plata finísima, para recubrir las paredes interiores del templo,
para la construcción del templo ciento setenta quintales de oro, diez mil dáñeos, tres mil cuatrocientos treinta quintales de plata, seis mil ciento setenta y cuatro toneladas de bronce y tres mil cuatrocientas treinta toneladas de hierro.
Esta fue la oferta de los jefes israelitas por la dedicación del altar cuando fue ungido:
doce bandejas de oro de cien gramos cada una (pesos del santuario) llenos de incienso; en total, mil doscientos gramos de oro;
Ella, instigada por su madre, le dijo: Dame ahora mismo en una bandeja la cabeza de Juan Bautista.