se vestía como un traje la maldición: que le empape como agua las entrañas, como aceite los tuétanos;
Números 5:27 - Nueva Biblia Española (1975) Después dará a beber el agua a la mujer. Si ésta se ha manchado y ha sido infiel a su marido, al entrar en ella el agua amarga de la maldición, se le hinchará el vientre y se le aflojarán los muslos, y la mujer será maldita entre los suyos. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Le dará, pues, a beber las aguas; y si fuere inmunda y hubiere sido infiel a su marido, las aguas que obran maldición entrarán en ella para amargar, y su vientre se hinchará y caerá su muslo; y la mujer será maldición en medio de su pueblo. Biblia Nueva Traducción Viviente Si ella se ha contaminado siendo infiel a su marido, el agua que trae la maldición le producirá un sufrimiento amargo. Su abdomen se hinchará y su útero se encogerá, y su nombre se volverá una maldición entre su pueblo. Biblia Católica (Latinoamericana) Si la mujer fue infiel a su marido y se hizo impura, el agua que bebió se volverá amarga en ella, se le hinchará el vientre y se le marchitarán los senos y será mujer maldita en medio de su pueblo. La Biblia Textual 3a Edicion Cuando le haya hecho beber las aguas, ocurrirá que si ella se ha mancillado y ha sido infiel a su marido, las aguas de maldición penetrarán en ella haciéndose amargas, y su vientre se hinchará y se caerá su muslo, y la mujer llegará a ser por maldición en medio de su pueblo. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Una vez haya ella bebido aguas, sucederá que, si se ha manchado y ha sido infiel a su marido, penetrará en ella el agua de la maldición y le será amarga; se le hinchará el vientre y languidecerán sus caderas, y se convertirá en objeto de imprecación en medio de su pueblo. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y cuando él la haya hecho beber el agua, sucederá que si ella está contaminada y ha cometido traición contra su marido, el agua que causa la maldición entrará en ella y se volverá amarga y su vientre se hinchará, y su muslo se pudrirá, y la mujer será una maldición entre su pueblo. |
se vestía como un traje la maldición: que le empape como agua las entrañas, como aceite los tuétanos;
y descubrí que es más trágica que la muerte la mujer cuyos pensamientos son redes y lazos y sus brazos cadenas. El que agrada a Dios se librará de ella, el pecador quedará atrapado en ella.
Legarán su nombre a mis elegidos como fórmula de imprecación. A ustedes el Señor les dará muerte, y a sus siervos les dará otro nombre.
Serán terrible escarmiento para todos los reinos del mundo, serán tema de mofas, sátiras, chanzas y maldiciones en todos los lugares por donde los disperse.
Los perseguiré con la espada, el hambre y la peste, y haré de ellos un escarmiento para todos los reinos de la tierra, y maldición y espanto y burla y oprobio de todas las naciones por donde los dispersé.
Y darán origen a una maldición que se correrá entre todos los judíos desterrados en Babilonia: 'El Señor te trate como a Ajab y a Sedecías, a quienes asó el rey de Babilonia'.
Porque así dice el Señor de los ejércitos, Dios de Israel: Como se derramó mi ira y mi cólera sobre los habitantes de Jerusalén, así se derramará mi cólera sobre ustedes si van a Egipto. Serán maldición y espanto, execración y burla, y no volverán a ver este lugar.
Me llevaré el resto de Judá que se empeñó en ir a Egipto para residir allí. Se consumirán todos en Egipto, caerán a espada o se consumirán de hambre, del menor al mayor morirán a espada o de hambre, y serán execración y espanto, maldición y burla.
Como fueron maldecidos por los paganos, Judá e Israel, así los salvaré y serán bendecidos. No teman, cobren ánimos.
Pero si has engañado a tu marido, estando bajo su potestad, si te has manchado acostándote con otro que no sea tu marido
Si la mujer no se ha manchado, sino que está limpia, no sufrirá daño y podrá concebir.
Y ¿qué salían ganando entonces de aquello, que ahora reconocen funesto? Porque eso lleva a la muerte.
para éstos, un olor que da muerte y sólo muerte; para los otros, un olor que da vida y sólo vida. Y para esto, ¿quién tiene aptitudes?
Serás el asombro, el refrán y la burla de todos los pueblos adonde te deporte el Señor, tu Dios.
Sobre todo, a los que se van tras los deseos infectos de la carne y menospreciaron toda autoridad. Temerarios y suficientes, maldicen sin temblar a seres gloriosos,