Que nos entreguen siete de sus hijos varones, y los colgaremos en honor del Señor, en Gabaón, en la montaña del Señor. David respondió: Yo se los entregaré.
Números 25:4 - Nueva Biblia Española (1975) El Señor dijo a Moisés: Toma a los responsables del pueblo y cuélgalos delante del Señor, a la luz del sol, y se apartará de Israel la ira del Señor. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y Jehová dijo a Moisés: Toma a todos los príncipes del pueblo, y ahórcalos ante Jehová delante del sol, y el ardor de la ira de Jehová se apartará de Israel. Biblia Nueva Traducción Viviente Entonces el Señor le dictó a Moisés la siguiente orden: «Detén a todos los cabecillas y ejecútalos delante del Señor, a plena luz del día, para que su ira feroz se aleje del pueblo de Israel». Biblia Católica (Latinoamericana) Yavé dijo entonces a Moisés: 'Apresa a todos los cabecillas del pueblo y empálalos de cara al sol, ante Yavé; de ese modo se apartará de Israel la cólera de Yavé. La Biblia Textual 3a Edicion Y dijo YHVH a Moisés: Prende a todos los jueces del pueblo, y hazlos ahorcar delante de YHVH a pleno sol, y el ardor de la ira de YHVH se apartará de Israel. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Dijo Yahveh a Moisés: 'Reúne a todos los jefes del pueblo y cuélgalos ante Yahveh, frente al sol, para que se aleje de Israel la cólera de Yahveh'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y Jehová dijo a Moisés: Toma todos los príncipes del pueblo, y ahórcalos ante Jehová delante del sol; y la ira del furor de Jehová se apartará de Israel. |
Que nos entreguen siete de sus hijos varones, y los colgaremos en honor del Señor, en Gabaón, en la montaña del Señor. David respondió: Yo se los entregaré.
se los entregó a los gabaonitas, que los colgaron en el monte, ante el Señor. Murieron los siete a la vez; fueron ajusticiados durante la siega, al comienzo de la siega de la cebada.
Escogió entre todos los israelitas gente hábil y los puso al frente del pueblo, como jefes de mil, de cien, de cincuenta y de veinte,
A ver si Dios se arrepiente, cesa el incendio de su ira y no perecemos.
El sacerdote Fineés, hijo de Eleazar, hijo de Aarón, celoso de mis derechos ante el pueblo, ha apartado mi cólera de los israelitas y mi celo no los ha consumido;
porque ellos te atacaron con sus seducciones, con los ritos de Fegor y con Cosbí, la hija del príncipe madianita, muerta el día de la matanza, cuando lo de Fegor.
Así, todo Israel, al enterarse, escarmentará, y no volverá a cometerse entre los tuyos maldad semejante.
han salido canallas que extravían a los vecinos, proponiéndoles: 'Vamos a dar culto a dioses extranjeros y desconocidos',
pasarás a cuchillo a los vecinos, dedicarás al exterminio la ciudad con todo lo que hay dentro y con el ganado;
Que no se te pegue a las manos nada dedicado al exterminio. Así, el Señor renunciará a su cólera, te tratará con compasión y, compadecido, te hará crecer como prometió a tus padres.
Si uno sentenciado a pena capital es ajusticiado y colgado de un árbol,
su cadáver no quedará en el árbol de noche; lo enterrarás aquel mismo día, porque Dios maldice al que cuelga de un árbol, y no debes contaminar la tierra que el Señor, tu Dios, va a darte en heredad.
Sus ojos han visto lo que el Señor hizo en Baal Fegor; el Señor, tu Dios, exterminó en medio de ti a todos los que se fueron con el ídolo de Fegor;
¡Como si no nos bastara el crimen de Fegor, que no hemos logrado borrar de nosotros hasta hoy, y eso que vino un castigo a la comunidad del Señor!
y convocó a todo Israel, a los ancianos, cabezas de familias, jueces y alguaciles, y les dijo: Yo ya soy viejo, de edad avanzada.