Anda, come tu pan con alegría y bebe contento tu vino, porque Dios ya ha aceptado tus obras;
Mateo 9:2 - Nueva Biblia Española (1975) En esto intentaban acercarle un paralítico echado en una camilla. Viendo la fe que tenían, Jesús dijo al paralítico: ¡Animo, hijo! Se te perdonan tus pecados. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y sucedió que le trajeron un paralítico, tendido sobre una cama; y al ver Jesús la fe de ellos, dijo al paralítico: Ten ánimo, hijo; tus pecados te son perdonados. Biblia Nueva Traducción Viviente Unos hombres le llevaron a un paralítico en una camilla. Al ver la fe de ellos, Jesús le dijo al paralítico: «¡Ánimo, hijo mío! Tus pecados son perdonados». Biblia Católica (Latinoamericana) Allí le llevaron a un paralítico, tendido en una camilla. Al ver Jesús la fe de esos hombres, dijo al paralítico: '¡Animo, hijo; tus pecados quedan perdonados!' La Biblia Textual 3a Edicion Y he aquí le trajeron un paralítico, echado en un catre, y viendo Jesús la fe° de ellos,° dijo al paralítico: Ten ánimo, hijo, tus pecados te son perdonados. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Entonces le presentaron un paralítico tendido en una camilla. Cuando Jesús vio la fe que tenían, dijo al paralítico: '¡Ánimo, hijo! Te quedan perdonados tus pecados'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y he aquí, le trajeron a un paralítico echado en una cama; y viendo Jesús la fe de ellos, dijo al paralítico: Hijo, ten ánimo, tus pecados te son perdonados. |
Anda, come tu pan con alegría y bebe contento tu vino, porque Dios ya ha aceptado tus obras;
He disipado como niebla tus rebeliones; como nube tus pecados: vuelve a mi, que soy tu redentor.
Se hablaba de él en toda Siria: le traían enfermos con toda clase de enfermedades y dolores, endemoniados, epilépticos y paralíticos, y él los curó.
y perdónanos nuestras deudas, que también nosotros perdonamos a nuestros deudores;
Al oír esto Jesús dijo admirado a los que lo seguían: Les aseguro que en ningún israelita he encontrado tanta fe.
Al anochecer le llevaron muchos endemoniados; con su palabra expulsó a los espíritus y curó X todos los enfermos,
Jesús se volvió y al verla le dijo: ¡Animo, hija! Tu fe te ha curado. Y desde aquel momento quedó curada la mujer.
A ver, ¿qué es más fácil, decir 'se te perdonan tus pecados' o decir 'levántate y echa a andar'?
'Pues para que sepan que el hombre está autorizado para perdonar pecados en la tierra... -le dijo entonces al paralítico-: Ponte en pie, carga con tu camilla y vete a tu casa.
Al atardecer, cuando se puso el sol, le fueron llevando todos los enfermos y endemoniados.
Jesús se detuvo y dijo: Llámenlo. Llamaron al ciego diciéndole: Animo, levántate, que te llama.
El le dijo: Hija, tu fe te ha curado. Vete en paz y sigue sana de tu tormento.
porque todos lo vieron y se sobresaltaron. Pero él les habló en seguida y les dijo: Animo, soy yo, no tengan miedo.
y porque no necesitaba que nadie hiciera declaraciones sobre el hombre, pues él conocía lo que el hombre llevaba dentro.
Les preguntó Jesús: Muchachos, ¿tienen algo de pescado para acompañar? Le contestaron: No.
Escuchaba las palabras de Pablo; Pablo lo miró fijo y, viendo que tenía una fe capaz de curarlo,
hasta el punto que bastaba aplicar a los enfermos pañuelos o prendas que él llevaba encima, para ahuyentar las enfermedades y expulsar los espíritus malos.
La noche siguiente se presentó el Señor a Pablo y le dijo: ¡Animo! Lo mismo que has dado testimonio a favor mío en Jerusalén, tienes que darlo en Roma.
Más aún, gracias a Jesús Mesías, Señor nuestro, que nos ha obtenido la reconciliación, estamos también orgullosos de Dios.
Y si alguno dijera que tú tienes fe y yo tengo obras, muéstrame esa fe tuya sin obras, que yo te mostrará la fe con mis obras.