Y se pasaban el día en el templo bendiciendo a Dios.
y estaban siempre en el templo, alabando y bendiciendo a Dios. Amén.
y pasaban todo su tiempo en el templo, adorando a Dios.
y continuamente estaban en el Templo alabando a Dios.
y estaban siempre en el templo bendiciendo° a Dios.°
Y estaban continuamente en el templo bendiciendo a Dios.
y enséñenles aguardar todo lo que les mandé; miren que yo estoy con ustedes cada día hasta el fin del mundo.
Ellos se fueron a predicar el mensaje por todas partes y el Señor cooperaba confirmándolo con las señales que los acompañaban.
Ellos se postraron ante él y se volvieron a Jerusalén llenos de alegría.
Al principio ya existía la Palabra, y la Palabra se dirigía a Dios y la Palabra era Dios.
El favor del Señor Jesús esté con todos.