Te manifesté mi pecado, no te encubrí mi delito, propuse: 'Confesaré al Señor mi culpa', y tú perdonaste mi culpa y mi pecado.
Lucas 23:43 - Nueva Biblia Española (1975) Y añadió: Jesús, acuérdate de mí cuando vuelvas como rey. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Entonces Jesús le dijo: De cierto te digo que hoy estarás conmigo en el paraíso. Biblia Nueva Traducción Viviente Jesús respondió: —Te aseguro que hoy estarás conmigo en el paraíso. Biblia Católica (Latinoamericana) Jesús le respondió: 'En verdad te digo que hoy mismo estarás conmigo en el paraíso. La Biblia Textual 3a Edicion Le dijo:° De cierto te digo, hoy estarás conmigo en el paraíso. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Él le contestó: 'Yo te aseguro que hoy estarás conmigo en el paraíso'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Entonces Jesús le dijo: De cierto te digo: Hoy estarás conmigo en el paraíso. |
Te manifesté mi pecado, no te encubrí mi delito, propuse: 'Confesaré al Señor mi culpa', y tú perdonaste mi culpa y mi pecado.
Por los trabajos soportados verá la luz, se saciará de saber; mi siervo inocente rehabilitará a todos porque cargó con sus crímenes.
Antes de que me llamen yo les responderé, aún estarán hablando y los habré escuchado.
¿Qué Dios como tú perdona el pecado y absuelve la culpa al resto de su heredad? No mantendrá siempre la ira, pues ama la misericordia;
Porque este Hombre ha venido a buscar lo que estaba perdido y a salvarlo.
Y la nuestra es justa, nos dan nuestro merecido; en cambio, éste no ha hecho nada mal.
Además, cuando vaya y se lo prepare, vendré de nuevo y los acogeré conmigo; así, donde estoy yo, también ustedes estarán.
Padre, quiero que también ellos, los que me has entregado, estén conmigo donde estoy yo, para que contemplen mi gloria, la que tú me has dado, porque me amaste antes que existiera el mundo.
A pesar de todo, estamos animosos, aunque preferiríamos el destierro lejos del cuerpo y vivir con el Señor.
Las dos cosas tiran de mí: deseo morirme y estar con Cristo (y esto es con mucho lo mejor);
De ahí que puede también salvar hasta el final a los que por su medio se van acercando a Dios, pues está siempre vivo para interceder por ellos.
Quien tenga oídos, oiga lo que dice el Espíritu a las iglesias. Al que salga vencedor le concederé comer del árbol de la vida, que está en el jardín de Dios.