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Levítico 9:22 - Nueva Biblia Española (1975)

Aarón, alzando las manos sobre el pueblo, lo bendijo, y después de haber ofrecido el sacrificio expiatorio, el holocausto y el sacrificio de comunión, bajó.

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Biblia Reina Valera 1960

Después alzó Aarón sus manos hacia el pueblo y lo bendijo; y después de hacer la expiación, el holocausto y el sacrificio de paz, descendió.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

Entonces Aarón levantó las manos hacia el pueblo y lo bendijo. Después de presentar la ofrenda por el pecado, la ofrenda quemada y la ofrenda de paz, se bajó del altar.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

Aarón, levantando las manos hacia el pueblo, lo bendijo, y luego descendió, pues terminaba de ofrecer el sacrificio por el pecado, el holocausto y el sacrificio de comunión.

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La Biblia Textual 3a Edicion

Después alzó Aarón sus manos hacia el pueblo y los bendijo,° y descendió de sacrificar la ofrenda por el pecado, por el holocausto, y por las ofrendas de paz.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

Alzando Aarón su mano hacia el pueblo, lo bendijo y, después de haber realizado el sacrificio por el pecado, el holocausto y el sacrificio de comunión, descendió.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Entonces Aarón alzó sus manos hacia el pueblo y los bendijo; y descendió de hacer la ofrenda por el pecado, el holocausto y las ofrendas de paz.

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Levítico 9:22
16 Tagairtí Cros  

Y puesto en pie, echó esta bendición en voz alta a toda la asamblea israelita:


Hijos de Amrán: Aarón y Moisés. A Áarón y a sus descendientes los apartaron a perpetuidad para ofrecer los dones sacrosantos, quemar incienso ante el Señor, servirle y bendecir en su nombre.


y yo te he construido un palacio, un sitio donde vivas para siempre.


que su nombre sea eterno, y su fama dure como el sol: que para bendecirse se deseen su dicha todos los pueblos y lo feliciten todas las razas de la tierra.


Moisés examinó toda la labor, comprobó que se ajustaban a lo ordenado por el Señor, y les dio la bendición.


Y tomándolos en brazos, los bendecía imponiéndoles las manos.


Después los sacó hacia Betania y, levantando las manos, los bendijo.


Por ustedes en primer lugar suscitó Dios a su siervo y lo envió para que les trajera esa bendición, con tal que se aparten cada uno de sus pecados.


En aquella ocasión el Señor apartó a la tribu de Leví para que llevara el arca de la alianza del Señor, estuviera a disposición del Señor para servirle y para que bendijera en su nombre, y así hacen todavía hoy.


después se acercarán los sacerdotes levitas que eligió el Señor, tu Dios, para que le sirvan y bendigan en su nombre, competentes en lo civil y en lo criminal,


No devuelvan mal por mal ni insulto por insulto; al contrario, respondan con bendiciones, pues a esto los llamaron: a heredar una bendición.