pero sí vuelven a mí y ponen en práctica mis preceptos, aunque sus desterrados se encuentren en los confines del mundo, allá iré a reunirlos y los llevaré al lugar que elegí para morada de mi nombre'.
Levítico 26:3 - Nueva Biblia Española (1975) Si siguen mi legislación y cumplen mis preceptos poniéndolos por obra, Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Si anduviereis en mis decretos y guardareis mis mandamientos, y los pusiereis por obra, Biblia Nueva Traducción Viviente »Si siguen mis decretos y se aseguran de obedecer mis mandatos, Biblia Católica (Latinoamericana) Si caminan según mis tradiciones y guardan mis normas poniéndolas en práctica, La Biblia Textual 3a Edicion Si andáis en mis estatutos y guardáis mis mandamientos para ponerlos por obra, Biblia Serafín de Ausejo 1975 Si camináis según mis leyes, si guardáis mis mandamientos y los ponéis en práctica, Biblia Reina Valera Gómez (2023) Si anduviereis en mis decretos, y guardareis mis mandamientos, y los pusiereis por obra; |
pero sí vuelven a mí y ponen en práctica mis preceptos, aunque sus desterrados se encuentren en los confines del mundo, allá iré a reunirlos y los llevaré al lugar que elegí para morada de mi nombre'.
Ustedes sirvan al Señor, su Dios, y él bendecirá tu pan y tu agua. Apartaré de ti las enfermedades.
Te dará lluvia para la semilla que siembres en el campo, el grano de la cosecha del campo será rico y sustancioso; aquel día tus ganados pastarán en anchas praderas;
que yo impuse a sus padres cuando los saqué de Egipto, de aquel horno de hierro: 'Obedézcanme y hagan lo que les mando; así serán mi pueblo y yo seré su Dios'.
Y al quinto podrán comer de ellos; así incrementarán para su provecho el rendimiento del árbol. Yo soy el Señor, su Dios.
Sembrarán tranquilos, la cepa dará su fruto, la tierra dará su cosecha, el cielo dará el rocío; todo se lo lego al resto de este pueblo.
Traigan íntegros los diezmos al tesoro del templo para que haya sustento en mi templo; hagan la prueba conmigo -dice el Señor de los ejércitos- y verán cómo les abro las compuertas del cielo y derrocho sobre ustedes bendiciones sin cuento.
Si escuchas estos decretos y los mantienes y los cumples, también el Señor, tu Dios, te mantendrá la alianza y el favor que prometió a tus padres.
Dichosos los que lavan su ropa para tener derecho al árbol de la vida y entrar por las puertas de la ciudad.