Y dijo Dios: Bullan las aguas con un bullir de vivientes, y vuelen pájaros sobre la tierra frente a la bóveda del cielo.
Levítico 11:10 - Nueva Biblia Española (1975) Y todo reptil o animal acuático, de mar o de río, que no tenga escamas y aletas, ténganlo por inmundo. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Pero todos los que no tienen aletas ni escamas en el mar y en los ríos, así de todo lo que se mueve como de toda cosa viviente que está en las aguas, los tendréis en abominación. Biblia Nueva Traducción Viviente Sin embargo, nunca comas ningún animal del mar o de los ríos que no tenga aletas y escamas. Son detestables para ti. Esto incluye tanto a las criaturas pequeñas que viven en aguas poco profundas como a todas las criaturas que viven en aguas profundas. Biblia Católica (Latinoamericana) Pero ustedes tendrán asco a los bichos y los animales que viven en el mar o en los ríos, y que no tienen aletas ni escamas. La Biblia Textual 3a Edicion Pero todo lo que hay en los mares y en los ríos que no tenga aletas ni escamas, sea reptil o cualquier animal acuático, os serán abominación.° Biblia Serafín de Ausejo 1975 Pero de entre todo lo que pulula en el agua, y de entre todo animal viviente que hay en el agua, todo lo que no tiene aletas ni escamas, en mares y en ríos, será abominable para vosotros. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Mas todas las cosas que no tienen aletas ni escamas en el mar y en los ríos, así de todo reptil de agua como de toda cosa viviente que está en las aguas, las tendréis en abominación. |
Y dijo Dios: Bullan las aguas con un bullir de vivientes, y vuelen pájaros sobre la tierra frente a la bóveda del cielo.
Trata con los doctos y te harás docto, el que se junta con ignorantes se echa a perder.
El criminal es aborrecido por los honrados, el hombre recto es aborrecido por los malvados.
De los animales acuáticos, de mar o de río, pueden comer los que tienen escamas y aletas.
Y si alguno come carne de este sacrificio de comunión al tercer día, el sacrificio es inválido, no se le tendrá en cuenta. Lo que sobra se considera desecho, y el que lo coma cargará con la culpa.
pero los que no tienen aletas ni escamas no los pueden comer, ténganlos por impuros.
En cambio, a los cobardes, infieles, infames, asesinos, lujuriosos, hechiceros e idólatras y a todos los embusteros les tocará en suerte el lago de azufre ardiendo, que es la segunda muerte.