No tendrán necesidad de combatir; estén quietos y firmes contemplando cómo los salva el Señor. Judá y Jerusalén, no se asusten ni acobarden. Salgan mañana a su encuentro, que el Señor estará con ustedes.
Jueces 7:9 - Nueva Biblia Española (1975) Y el Señor habló a Gedeón aquella noche: Levántate, baja contra el campamento enemigo, que yo te lo entrego. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Aconteció que aquella noche Jehová le dijo: Levántate, y desciende al campamento; porque yo lo he entregado en tus manos. Biblia Nueva Traducción Viviente Esa noche el Señor le dijo: «¡Levántate! ¡Desciende al campamento madianita, porque te he dado la victoria sobre ellos! Biblia Católica (Latinoamericana) Esa noche Yavé dijo a Gedeón: 'Baja al campamento de los madianitas, nada tienes que temer de ellos. La Biblia Textual 3a Edicion Y sucedió aquella noche que YHVH le dijo: Levántate, baja al campamento, porque lo he entregado en tu mano. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Aquella misma noche Yahveh le habló así: 'Levántate y baja al campamento, porque lo voy a entregar en tus manos. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y aconteció que aquella noche Jehová le dijo: Levántate, y desciende al campamento; porque yo lo he entregado en tus manos. |
No tendrán necesidad de combatir; estén quietos y firmes contemplando cómo los salva el Señor. Judá y Jerusalén, no se asusten ni acobarden. Salgan mañana a su encuentro, que el Señor estará con ustedes.
Pero, apenas tomó esta resolución, se le apareció en sueños el ángel del Señor, que le dijo: José, hijo de David, no tengas inconveniente en llevarte contigo a María, tu mujer, porque la criatura que lleva en su seno viene del Espíritu Santo.
Apenas se marcharon, el ángel del Señor se apareció en sueños a José y le dijo: Levántate, toma al niño y a su madre y huye a Egipto; quédate allí hasta nuevo aviso, porque Herodes va a buscar al niño para matarlo.
porque esta noche se me ha presentado un mensajero del Dios a quien pertenezco y sirvo,
y el Señor le dijo: No les tengas miedo, que yo te los entrego; ni uno de ellos podrá resistirse.
El Señor dijo a Josué: No les tengas miedo, que mañana, a estas horas, a todos ellos los haré caer ante Israel; les desjarretarás los caballos y les quemarás los carros.
le dijeron: El Señor nos entrega todo el país. Toda la gente tiembla ante nosotros.
y oficiaba Fineés, hijo de Eleazar, hijo de Aarón): ¿Volvemos a salir al combate contra nuestro hermano Benjamín, o desistimos? El Señor respondió: Ataquen, que mañana se lo entregaré.
Vino sobre él el espíritu del Señor, gobernó a Israel y salió a luchar; el Señor puso en sus manos a Cusan Risatain, rey de la Siria Entremos, y Otoniel se le impuso.
Ehud los arengó: ¡Síganme!, que el Señor ha puesto en poder de ustedes a Moab, su enemigo. Bajaron tras él y ocuparon los vados del Jordán, cortando el paso a Moab; no dejaron pasar ni a uno.
Tomaron, pues, sus provisiones y sus trompetas, y Gedeón despidió a los israelitas, cada uno a su casa, reteniendo consigo a los trescientos. El campamento de Madián les quedaba abajo, en el valle.
Jonatán dijo: Mira, vamos a pasar hasta esos hombres; nos descubrirán.
David volvió a consultar al Señor. Y el Señor le respondió: Emprende la marcha hacia Queilá, que yo te entrego a los filisteos.