diciendo: Señor, si he alcanzado tu favor, no pases de largo junto a tu siervo.
Jueces 6:19 - Nueva Biblia Española (1975) Gedeón marchó a preparar un cabrito y unos panes ázimos con media fanega de harina; colocó luego la carne en el canasto y echó el caldo en la olla; se lo llevó al Señor y se lo ofreció bajo la encina. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y entrando Gedeón, preparó un cabrito, y panes sin levadura de un efa de harina; y puso la carne en un canastillo, y el caldo en una olla, y sacándolo se lo presentó debajo de aquella encina. Biblia Nueva Traducción Viviente Entonces Gedeón fue de prisa a su casa. Asó un cabrito y horneó pan sin levadura con una medida de harina. Luego llevó la carne en una canasta y el caldo en una olla. Puso todo delante del ángel, quien estaba bajo el gran árbol. Biblia Católica (Latinoamericana) Se fue pues Gedeón; preparó un cabrito y con una medida de harina hizo panes sin levadura. Puso la carne en una canasta y el caldo en un una olla y lo llevó todo para ofrecérselo bajo el terebinto. La Biblia Textual 3a Edicion Entonces Gedeón entró y preparó un cabrito y un efa de harina de panes sin levadura; luego puso la carne en una canasta y el caldo en una olla, y lo sacó y se lo ofreció bajo la encina. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Fue Gedeón y preparó un cabrito; con un efá de harina hizo panes ázimos; y, poniendo la carne en un canastillo y el caldo en una olla, se los llevó bajo el terebinto y se los ofreció. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y entrando Gedeón aderezó un cabrito, y panes sin levadura de un efa de harina; y puso la carne en un canastillo, y el caldo en una olla, y sacándolo se lo presentó debajo de aquella encina. |
diciendo: Señor, si he alcanzado tu favor, no pases de largo junto a tu siervo.
Mientras, ya que pasan junto a su siervo, traeré un pedazo de pan para que recuperen fuerzas antes de seguir. Contestaron: Bien, haz lo que dices.
Si haces una ofrenda cocida al horno, ésta será de roscas ázimas de flor de harina amasada con aceite y de obleas ázimas untadas de aceite.
Les dijo otra parábola: Se parece el reinado de Dios a la levadura que metió una mujer en veinticinco libras' de harina; todo acabó por fermentar.
Al subir la llama del altar hacia el cielo, el ángel del Señor subió también en la llama, ante Manoj y su mujer, que cayeron rostro en tierra.
No te vayas de aquí hasta que yo vuelva con una ofrenda y te la presente. El Señor dijo: Aquí me quedaré hasta que vuelvas.
El ángel del Señor le dijo: Toma la carne y los panes ázimos, colócalos sobre esta roca y derrama el caldo. Así lo hizo.