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Jueces 5:4 - Nueva Biblia Española (1975)

Señor, cuando salías de Seír avanzando desde los campos de Edom, la tierra temblaba, los cielos destilaban, agua destilaban las nubes,

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Biblia Reina Valera 1960

Cuando saliste de Seir, oh Jehová, Cuando te marchaste de los campos de Edom, La tierra tembló, y los cielos destilaron, Y las nubes gotearon aguas.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

»Señor, cuando saliste de Seir y marchaste por los campos de Edom, la tierra tembló, y los cielos nublados derramaron lluvias torrenciales.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

¡Oh Yavé! Cuando saliste de Seir, atravesando los campos de Edom, tembló la tierra, los cielos se deshicieron, las nubes se convirtieron en agua.

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La Biblia Textual 3a Edicion

Cuando saliste de Seír, oh YHVH, Cuando avanzaste desde el campo de Edom, La tierra se estremeció, los cielos destilaron, Y las nubes gotearon agua.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

Cuando tú, Yahveh, salías de Seír cuando avanzabas por los campos de Edom, se estremeció la tierra, gotearon los cielos y las nubes destilaron agua.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Jehová, cuando saliste de Seir, cuando te apartaste del campo de Edom, la tierra tembló, y los cielos destilaron, y las nubes gotearon aguas.

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Jueces 5:4
13 Tagairtí Cros  

y les encargó: Así dirán a mi señor Esaú: 'Esto dice tu siervo Jacob: He vivido con Labán y he estado con él hasta ahora;


Tembló y retembló la tierra, vacilaron los cimientos del cielo, sacudidos por su cólera.


estremece la tierra en sus cimientos, y sus columnas retiemblan;


Derramaste en tu heredad una lluvia generosa, oh Dios, aliviaste la tierra extenuada;


las nubes descargaban sus aguas, retumbaban los nubarrones, tus saetas zigzagueaban;


rodaba el estruendo de tu trueno, los relámpagos deslumbraban el orbe, la tierra retembló estremecida:


estamos como antaño, cuando no nos gobernabas y no llevábamos tu nombre.


Bajo él se derriten los montes y los valles se resquebrajan, como cera junto al fuego, como agua precipitada por la torrentera.


'El Señor viene del Sinai amaneciendo desde Seir, radiante desde Monte Farán, avanza desde Careo de Cades.


Su voz entonces hizo vacilar la tierra, pero ahora tiene prometido esto: 'La última vez haré vacilar no sólo la tierra, sino también el cielo”,