y ordenó a sus sirvientes: Fíjense. Cuando Amnón esté ya borracho y yo les dé la orden de herirlo, lo matan, sin miedo ninguno; se lo mando yo. Animo, sean valientes.
Jueces 16:25 - Nueva Biblia Española (1975) Cuando ya estaban alegres, dijeron: Saquen a Sansón, que nos divierta. Sacaron a Sansón de la cárcel, y bailaba en su presencia. Luego lo plantaron entre las columnas. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y aconteció que cuando sintieron alegría en su corazón, dijeron: Llamad a Sansón, para que nos divierta. Y llamaron a Sansón de la cárcel, y sirvió de juguete delante de ellos; y lo pusieron entre las columnas. Biblia Nueva Traducción Viviente Los presentes, ya medio borrachos, exigieron: «¡Traigan a Sansón para que nos divierta!». Así que lo sacaron de la prisión para que los entretuviera, y lo pusieron de pie entre las columnas que sostenían la azotea. Biblia Católica (Latinoamericana) Cuando todos se sintieron bien contentos, dijeron: '¡Llamen a Sansón para que nos entretenga!' Fueron a buscar a Sansón a la prisión y él dio varias vueltas a la vista de todos, luego lo pusieron entre las columnas. La Biblia Textual 3a Edicion Y sucedió que cuando tuvieron alegre el corazón, dijeron: Llamad a Sansón para que nos divierta. Llamaron pues de la cárcel a Sansón, el cual los divertía. Y lo hicieron estar entre las columnas. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Y como sus corazones se sentían alegres dijeron: 'Llamad a Sansón para que nos divierta'. Trajeron a Sansón de la cárcel y les sirvió de diversión. Luego lo colocaron entre las columnas. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y aconteció que, alegrándose el corazón de ellos, dijeron: Llamad a Sansón, para que divierta delante de nosotros. Y llamaron a Sansón de la cárcel, y servía de juguete delante de ellos; y lo pusieron entre las columnas. |
y ordenó a sus sirvientes: Fíjense. Cuando Amnón esté ya borracho y yo les dé la orden de herirlo, lo matan, sin miedo ninguno; se lo mando yo. Animo, sean valientes.
Benadad estaba bebiendo en las tiendas con los reyes, y en cuanto oyó la respuesta, ordenó a sus oficiales. ¡A su puesto! Y se apostaron frente a la ciudad.
El séptimo día, cuando el rey estaba alegre por el vino, ordenó a Maumán, Bazata, Jarbona, Bagatá, Abgatá, Zetar y Carcas, los siete eunucos adscritos al servicio personal del rey Asuero,
Obedeciendo al rey, los correos partieron veloces. El edicto fue promulgado en la acrópolis de Susa, y mientras el rey y Aman banqueteaban, toda Susa quedó consternada.
sentados a la puerta cuchichean; mientras beben vino me sacan coplas.
porque persiguen al que tú has herido, cuentan las llagas del que tú has lacerado.
pero ustedes, fiesta y alegría, a matar vacas, a degollar corderos, a comer carne, a beber vino, 'a comer y a beber, que mañana moriremos'.
después trenzaron una corona de espino, se la pusieron en la cabeza y en la mano derecha una caña. Doblando la rodilla ante él, le decían de burla: ¡Salud, rey de los judíos!
Otros tuvieron que sufrir la ofensa de los azotes e incluso de cadenas y cárceles.
La gente al verlo alabó a su dios: 'Nuestro dios nos ha entregado a Sansón, nuestro enemigo, que asolaba nuestros campos y aumentaba nuestros muertos'.
Sansón rogó al lazarillo: Déjame tocar las columnas que sostienen el edificio para apoyarme en ellas.
Al sacerdote le gustó. Recogió el efod, los amuletos y el ídolo y se fue con ellos.
Se sentaron a comer y beber juntos. Después el padre de la muchacha dijo al yerno: Anda, quédate otro día, que te sentará bien.
Cuando el levita se levantó para marchar con su mujer y el sirviente, el suegro, el padre de la joven, le dijo: Mira, ya se hace tarde; pasa aquí la noche, que te sentará bien; mañana madrugas y haces el camino a casa.
Salieron al campo, a la vendimia, pisaron la uva y celebraron la fiesta; fueron al templo de su dios y comieron y bebieron, entre maldiciones a Abimelec.