No se apartará de Judá el cetro ni el bastón de mando de entre sus rodillas, hasta que le traigan tributo y le rindan homenaje los pueblos.
Juan 6:14 - Nueva Biblia Española (1975) Aquellos hombres, al ver la señal que había realizado, decían: Ciertamente éste es el Profeta, el que tenía que venir al mundo. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Aquellos hombres entonces, viendo la señal que Jesús había hecho, dijeron: Este verdaderamente es el profeta que había de venir al mundo. Biblia Nueva Traducción Viviente La gente, al ver la señal milagrosa que Jesús había hecho, exclamó: «¡No hay duda de que es el Profeta que esperábamos!». Biblia Católica (Latinoamericana) Al ver la señal que Jesús había hecho, los hombres decían: 'Este es sin duda el Profeta que había de venir al mundo. La Biblia Textual 3a Edicion Entonces los hombres, viendo la señal que° había hecho, decían: Éste es verdaderamente el Profeta que había de venir al mundo. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Cuando vieron los hombres la señal que Jesús había realizado, decían: 'Éste es, sin duda, el profeta que iba a venir al mundo'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Entonces aquellos hombres, cuando vieron el milagro que Jesús había hecho, dijeron: Verdaderamente Éste es el Profeta que había de venir al mundo. |
No se apartará de Judá el cetro ni el bastón de mando de entre sus rodillas, hasta que le traigan tributo y le rindan homenaje los pueblos.
La gente contestaba: Este es el profeta Jesús, el de Nazaret de Galilea.
El les preguntó: ¿De qué? Contestaron: De lo de Jesús Nazareno, que resultó ser un profeta poderoso en obras y palabras ante Dios y ante todo el pueblo;
Todos quedaron atemorizados y alababan a Dios, diciendo: Un gran profeta ha surgido entre nosotros. Dios ha visitado a su pueblo.
Le preguntaron: Entonces, ¿qué? ¿eres tú Elías? Contestó él: No lo soy. ¿Eres tú el profeta? Respondió: No.
Ella le contestó: Sí, Señor, yo creo firmemente que tú eres el Mesías, el Hijo de Dios, el que tenía que venir al mundo.
Esto hizo Jesús como principio de las señales en Cana de Galilea; manifestó su gloria, y sus discípulos le dieron su adhesión.
Le dice la mujer: Sé que va a venir un Mesías (es decir, Ungido); cuando venga él, nos lo explicará todo.
y decían a la mujer: Ya no creemos por lo que tú cuentas, nosotros mismos lo hemos estado oyendo y sabemos que éste es realmente el salvador del mundo.
Solía seguirlo mucha gente, porque percibían las señales que realizaba con los enfermos.
Les contestó Jesús: Sí, se lo aseguro: No me buscan por haber visto señales, sino por haber comido pan hasta saciarse.
Le dijeron: Y, ¿qué señal realizas tú para que viéndola te creamos?, ¿qué obra haces?
Al oír estas palabras, decían algunos de entre la gente: Ciertamente éste es el Profeta.
Fue Moisés quien dijo a los israelitas: 'Dios suscitará entre sus hermanos un profeta como yo”.