y le dijo: He escuchado 1a oración y súplica que me has dirigido. Consagro este templo que has construido, para que en él resida mi Nombre por siempre; siempre es . taran en él mi corazón y mis ojos.
Juan 4:20 - Nueva Biblia Española (1975) Nuestros padres celebraron el culto en este monte; en cambio, ustedes dicen que en Jerusalén está el lugar donde hay que celebrarlo. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Nuestros padres adoraron en este monte, y vosotros decís que en Jerusalén es el lugar donde se debe adorar. Biblia Nueva Traducción Viviente Así que dígame, ¿por qué ustedes, los judíos, insisten en que Jerusalén es el único lugar donde se debe adorar, mientras que nosotros, los samaritanos, afirmamos que es aquí, en el monte Gerizim, donde adoraron nuestros antepasados? Biblia Católica (Latinoamericana) Nuestros padres siempre vinieron a este cerro para adorar a Dios y ustedes, los judíos, ¿no dicen que Jerusalén es el lugar en que se debe adorar a Dios?' La Biblia Textual 3a Edicion Nuestros padres adoraron en este monte,° y vosotros decís que en Jerusalem está el lugar donde se debe adorar. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Nuestros padres adoraron en este monte; pero vosotros decís que es Jerusalén el lugar donde se debe adorar'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Nuestros padres adoraron en este monte, y vosotros decís que en Jerusalén es el lugar donde se debe adorar. |
y le dijo: He escuchado 1a oración y súplica que me has dirigido. Consagro este templo que has construido, para que en él resida mi Nombre por siempre; siempre es . taran en él mi corazón y mis ojos.
Construyó allí un altar al Señor. Ofreció holocaustos y sacrificios de comunión, invocó al Señor, que le respondió enviando fuego del cielo sobre el altar de los holocaustos.
Dijo David: Aquí se alzará el templo del Señor Dios y el altar de los holocaustos de Israel.
'Desde el día que saqué del país de Egipto a mi pueblo, no elegí ninguna ciudad de las tribus de Israel para hacerme un templo donde residiera mi Nombre, y no elegí a nadie para que fuera caudillo de mi pueblo, Israel,
Salomón terminó el templo del Señor y el palacio real; todo cuanto había deseado hacer para el templo y el palacio le salió perfectamente.
Mantendré los ojos abiertos y los oídos atentos a las súplicas que se hagan en este lugar.
Así dice el Señor: El cielo es mi trono, y la tierra, el estrado de mis pies: ¿qué templo podrán construirme o qué lugar para mi descanso?
¿Acaso eres tú más que nuestro padre Jacob, que nos dio el pozo, del que bebió él, sus hijos y sus ganados?
Cuando el Señor, tu Dios, te introduzca en la tierra adonde vas para tomarla en posesión, darás la bendición en el monte Garizín y la maldición en el monte Ebal.
Cuando crucen el Jordán, se colocarán sobre el monte Garizín las tribus de Simeón, Leví, Judá, Isacar, José y Benjamín para pronunciar la bendición al pueblo;