De madrugada se pusieron en marcha hacia el desierto de Tecua. Cuando salían, Josafat se detuvo y dijo: Judíos y habitantes de Jerusalén, escúchenme: confíen en el Señor, su Dios, y subsistirán; confíen en sus profetas, y vencerán.
Juan 11:40 - Nueva Biblia Española (1975) Le contestó Jesús: ¿No te he dicho que si llegas a creer verás la gloria de Dios? Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Jesús le dijo: ¿No te he dicho que si crees, verás la gloria de Dios? Biblia Nueva Traducción Viviente Jesús respondió: —¿No te dije que si crees, verás la gloria de Dios? Biblia Católica (Latinoamericana) Jesús le respondió: '¿No te he dicho que si crees verás la gloria de Dios?' La Biblia Textual 3a Edicion Jesús le dice: ¿No te dije que si crees verás la gloria de Dios? Biblia Serafín de Ausejo 1975 Jesús le responde: '¿No te dije que, si crees, verás la gloria de Dios?'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Jesús le dijo: ¿No te he dicho que si crees, verás la gloria de Dios? |
De madrugada se pusieron en marcha hacia el desierto de Tecua. Cuando salían, Josafat se detuvo y dijo: Judíos y habitantes de Jerusalén, escúchenme: confíen en el Señor, su Dios, y subsistirán; confíen en sus profetas, y vencerán.
Ha oído sus protestas contra el Señor; pues ¿qué somos nosotros para que protesten contra nosotros?
Les contestó: Porque tienen poca fe. Les aseguro que si tuvieran fe como un grano de mostaza le dirían al cerro éste: 'Córrete más allá', y lo haría. Nada les sería imposible'.
Jesús le replicó: ¡Ese 'si puedes' ! Todo es posible para el que tiene fe.
Así que la Palabra se hizo hombre, acampó entre nosotros y hemos contemplado su gloria -la gloria que un hijo único recibe de su padre-: plenitud de amor y lealtad.
Al oírlo, dijo Jesús: Esta enfermedad no es para muerte, sino para la gloria de Dios, para que por ella se manifieste la gloria del Hijo de Dios.
Contestó Jesús: Ni había pecado él ni tampoco sus padres, pero así se manifestarán en él las obras de Dios.
Luego aquella inmersión que nos vinculaba a su muerte nos sepultó con él, para que, así como el Mesías fue resucitado de la muerte por el poder del Padre, también nosotros empezáramos una vida nueva.
Y nosotros, que llevamos todos la cara descubierta y reflejamos la gloria del Señor, nos vamos transformando en su imagen con resplandor creciente; tal es el influjo del Espíritu' del Señor.
pues el Dios que dijo: 'Brille la luz del seno de las tinieblas', la ha encendido en nuestros corazones, haciendo resplandecer el conocimiento de la gloria de Dios, reflejada en el rostro del Mesías.