también lo llamó Atalaya, diciendo: El Señor nos vigilará a los dos cuando nos separemos.
Josué 11:3 - Nueva Biblia Española (1975) a los cananeos de levante y poniente, a los amorreos, hititas y fereceos, a los jebuseos de la montaña y a los heveos al pie del Hermón, en la región de Atalaya. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 y al cananeo que estaba al oriente y al occidente, al amorreo, al heteo, al ferezeo, al jebuseo en las montañas, y al heveo al pie de Hermón en tierra de Mizpa. Biblia Nueva Traducción Viviente a los reyes de Canaán, tanto del oriente como del occidente; y a los reyes de los amorreos, de los hititas, de los ferezeos, de los jebuseos en la zona montañosa y de los heveos en las ciudades que están en las laderas del monte Hermón, en la tierra de Mizpa. Biblia Católica (Latinoamericana) Los cananeos estaban al este y al oeste: los amoreos, los hititas, los fereceos y los jebuseos, en la montaña; los jeveos al pie del Hermón, en el territorio de Mispá. La Biblia Textual 3a Edicion al cananeo que estaba al oriente y al occidente, al amorreo, al heteo, al ferezeo, al jebuseo de la serranía, y al heveo, al pie del Hermón, en tierra de Mizpa. Biblia Serafín de Ausejo 1975 a los cananeos de oriente y occidente, a los amorreos, hititas, perizeos y jebuseos de la montaña y a los jiveos al pie del Hermón, en el país de Mispá. Biblia Reina Valera Gómez (2023) y al cananeo que estaba al oriente y al occidente, y al amorreo, y al heteo, y al ferezeo, y al jebuseo en las montañas, y al heveo debajo de Hermón en la tierra de Mizpa. |
también lo llamó Atalaya, diciendo: El Señor nos vigilará a los dos cuando nos separemos.
Llegaron a la fortaleza de Tiro y todas las poblaciones de los heveos y cananeos; luego salieron al sur de Judá, hacia Berseba.
Asá movilizó entonces a todo Judá, sin excepción. Desmontaron las piedras y leños con que Basa fortificaba Rama y los aprovecharon para fortificar Loma de Benjamín y Atalaya.
Es rocío del Hermón que va bajando sobre el monte Sión. Porque allí manda el Señor la bendición: la vida para siempre.
tú has creado el norte y el sur, el Tabor y el Hermón aclaman tu nombre.
Ven desde el Líbano, novia mía, ven; baja del Líbano, desciende de la cumbre del Amana, de la cumbre del Senir y del Hermón, de las cuevas de leones, de los montes de panteras.
Yo tengo que quedarme en Atalaya, a disposición de los caldeos que vengan a visitarnos; ustedes cosechen vino, fruta y aceite, métanlo en vasijas, y habiten en los pueblos que les toque ocupar.
Jeremías se fue con Godolías, hijo de Ajicán, a vivir con él, entre el pueblo que había quedado en el país.
Toda la gente que Ismael llevaba cautiva desde Atalaya cambió de dirección y se pasó a Juan, hijo de Carej.
Y a los judíos que acompañaban a Godolías en Atalaya y a los militares caldeos que se encontraban allí también los mató Ismael.
En la zona del desierto habitan los amalecitas; los héteos, jebuseos y amorreos viven en la montaña; los cananeos, junto al mar y junto al Jordán.
Toda la estepa a oriente del Jordán, desde Aroer, a orillas del Arnón,
Cuando el Señor, tu Dios, te introduzca en la tierra donde entras para tomar posesión de ella y expulse a tu llegada a naciones más grandes que tú -hititas, guirgasitas, amorreos, cananeos, fereceos, heveos y jebuseos-, siete pueblos más numerosos y fuertes que tú;
desde el Monte Pelado, que sube hacia Seír, hasta Baalgad, en el valle del Líbano, al pie del Monte Hermón. Se apoderó de todos sus reyes y los ajustició.
El Señor se los entregó a Israel, que los derrotó y persiguió hasta la capital de Sidón, Las Burgas y la parte oriental del valle de Atalaya. Los desbarataron hasta que no quedó un superviviente.
más Galaad, el territorio de los guesureos y mácateos, todo el Hermón y todo Basan hasta Salea,
todo el país de Biblos y el Líbano oriental, desde Baalgad, al pie del Hermón, hasta el Paso de Jamat.
Pero la tribu de Judá no pudo expulsar a los jebuseos que habitaban Jerusalén; por eso han seguido viviendo en Jerusalén, en medio de Judá, hasta hoy.
Así conocerán que un Dios vivo está en medio de ustedes, y que va a expulsar ante ustedes a cananeos, hititas, heveos, fereceos, guirgaseos, amorreos y jebuseos.
Todos los israelitas, desde Dan hasta Berseba, incluido el país de Galaad, fueron como un solo hombre a reunirse en asamblea ante el Señor en Atalaya.
Después preguntaron: ¿Quién de entre todas las tribus de Israel no acudió a la asamblea ante el Señor? Porque se habían juramentado solemnemente contra el que no se presentara ante el Señor en Atalaya, en estos términos: 'Es reo de muerte'.
¿Quién de las tribus de Israel no se presentó ante el Señor en Atalaya? Resultó que ningún hombre de Yabés de Galaad había venido a filas, a la asamblea;
los cinco principados filisteos, todos los cananeos, fenicios e hititas que habitan el Líbano, desde la cordillera de Baal Hermón hasta el Paso de Jamat.
Así, pues, los israelitas vivieron en medio de cananeos, hititas, amorreos, fereceos, heveos y jebuseos.