Sedecías, hijo de Canana, se hizo unos cuernos de hierro y decía: Así dice el Señor: Con éstos acornearás a los sirios hasta acabar con ellos.
Jeremías 23:16 - Nueva Biblia Española (1975) Así dice el Señor de los ejércitos: No hagan caso a sus profetas, que los embaucan: cuentan visiones de su fantasía, no de la boca del Señor; Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Así ha dicho Jehová de los ejércitos: No escuchéis las palabras de los profetas que os profetizan; os alimentan con vanas esperanzas; hablan visión de su propio corazón, no de la boca de Jehová. Biblia Nueva Traducción Viviente Esto dice el Señor de los Ejércitos Celestiales a su pueblo: «No escuchen a estos profetas cuando ellos les profeticen, llenándolos de esperanzas vanas. Todo lo que dicen son puros inventos. ¡No hablan de parte del Señor! Biblia Católica (Latinoamericana) Esto dice Yavé: No escuchen las palabras de estos profetas que profetizan para ustedes, porque los engañan contándoles las visiones de su propia imaginación y no lo que sale de la boca de Yavé. La Biblia Textual 3a Edicion Así dice YHVH Sebaot: No escuchéis a los profetas que os profetizan: Os llenan de vanas esperanzas, Visión sacada de su propio corazón, No de la boca de YHVH. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Así dice Yahveh Sebaot: 'No escuchéis las palabras de los profetas que os profetizan, porque os engañan: os cuentan la visión de su fantasía, no la de la boca de Yahveh. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Así dice Jehová de los ejércitos: No escuchéis las palabras de los profetas que os profetizan; os hacen vanos; hablan visión de su propio corazón, y no de la boca de Jehová. |
Sedecías, hijo de Canana, se hizo unos cuernos de hierro y decía: Así dice el Señor: Con éstos acornearás a los sirios hasta acabar con ellos.
Rechazaron sus mandatos y el pacto que había hecho el Señor con sus padres y las advertencias que les hizo; se fueron tras los ídolos vanos y se desvanecieron, imitando a las naciones vecinas, cosa que el Señor les había prohibido.
El rey de Israel reunió a los profetas, cuatrocientos hombres, y les preguntó: ¿Podemos atacar a Ramot de Galaad, o lo dejo? Respondieron: Ve. Dios se la entrega al rey.
Hijo mío, deja de aceptar la corrección y te perderás por falta de principios.
El Señor me contestó: Mentiras profetizan los profetas en mi nombre; no los envié, no los mandé, no les hablé; visiones engañosas, oráculos vanos, fantasías de su mente es lo que profetizan.
Así dice el Señor: ¿Qué delito encontraron en mí sus padres para alejarse de mí? Siguieron tras vaciedades y se quedaron vacíos,
Yo no envié a los profetas, y ellos corrían; no les hablé, y ellos profetizaban;
¿hasta cuándo seguirán los profetas profetizando embustes y las fantasías de su mente?
Porque cometieron una infamia en Israel, adulteraron con la mujer del prójimo y contaron embustes en mi nombre sin que yo los mandara. Lo sé y lo atestiguo, -oráculo del Señor-'.
Así dice el Señor de los ejércitos, Dios de Israel: No se dejen engañar por los profetas y adivinos que viven entre ustedes; no hagan caso de los sueños que ellos sueñan,
¿Quién es el sabio que lo entienda? A quien le haya hablado el Señor, que lo explique: ¿por qué perece el país y se abrasa como desierto intransitado?
Escuchen, mujeres, la palabra del Señor, reciban sus oídos la palabra de su boca: Ensayen a sus hijas una endecha, cada una a su vecina una elegía:
Hundió en la tierra las puertas, rompió los cerrojos. Rey y príncipes estaban entre los gentiles. No había ley. Y los profetas ya no recibían visiones del Señor.
de los profetas de Israel que profetizaban para Jerusalén, que tenían para ella visiones de paz, cuando no había paz?' -oráculo del Señor- ).
por tanto, no volverán a ver falsedades ni a vaticinar embustes; libraré a mi pueblo de sus manos, y sabrán que yo soy el Señor.
Esto dice el Señor: ¡Ay de los profetas mentecatos que se inventan profecías, cosas que nunca vieron, siguiendo su inspiración!
Visionarios falsos, adivinos de embustes, que decían '-oráculo del Señor-' cuando el Señor no los enviaba, esperando que cumpliera su palabra.
Sus profetas eran enjabelgadores que les ofrecían visiones falsas y les vaticinaban embustes, diciendo: Esto dice el Señor, cuando el Señor no hablaba.
Si viniera un profeta soltando embustes: 'Te invito a vino y licor', sería un profeta digno de este pueblo.
Cuidado con los profetas falsos, esos que se les acercan con piel de oveja, pero por dentro son lobos feroces.
Porque al descubrir a Dios, en vez de tributarle la alabanza y las gracias que Dios se merecía, su razonar se dedicó a vaciedades y su mente insensata se obnubiló.
Amigos míos, no den fe a toda inspiración'; sométanlas a prueba para ver si vienen de Dios, pues ya han salido en el mundo muchos falsos profetas.