y dijo: Bendito sea el Señor Dios de mi patrón Abrahán, que no ha olvidado su amor y lealtad con su siervo. El Señor me ha guiado a la casa del hermano de mi patrón.
Génesis 32:11 - Nueva Biblia Española (1975) líbrame del poder de mi hermano Esaú, pues temo que venga y mate a las madres con los hijos. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Líbrame ahora de la mano de mi hermano, de la mano de Esaú, porque le temo; no venga acaso y me hiera la madre con los hijos. Biblia Nueva Traducción Viviente Oh Señor, te ruego que me rescates de la mano de mi hermano Esaú. Tengo miedo de que venga para atacarme a mí y también a mis esposas y a mis hijos. Biblia Católica (Latinoamericana) Yo no soy digno de todos los favores que me has hecho, ni de la gran bondad que has tenido conmigo. Porque al partir, cuando atravesé el Jordán, no tenía más que mi bastón. Pero ahora, al volver, tengo suficiente como para hacer dos campamentos. La Biblia Textual 3a Edicion Líbrame, te ruego, de la mano de mi hermano, de la mano de Esaú, pues yo le temo, no sea que venga y me hiera tanto a la madre como a los hijos. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Muy lejos estoy de merecer todos los favores y toda la fidelidad que has dispensado a tu siervo. Sólo mi cayado tenía cuando vadeé este Jordán, y ahora poseo dos campamentos. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Líbrame ahora de la mano de mi hermano, de la mano de Esaú, porque le temo; no venga quizá, y me hiera a mí, y a la madre con los hijos. |
y dijo: Bendito sea el Señor Dios de mi patrón Abrahán, que no ha olvidado su amor y lealtad con su siervo. El Señor me ha guiado a la casa del hermano de mi patrón.
Esaú guardaba rencor a Jacob por la bendición que éste había recibido de su padre, y se decía: 'Cuando llegue el luto por mi padre, mataré a mi hermano Jacob'.
Le contaron a Rebeca lo que decía su hijo mayor Esaú, y mandó llamar a Jacob, el hijo menor, y le dijo: Esaú, tu hermano, quiere matarte para vengarse.
Jacob envió por delante mensajeros a Esaú, su hermano, al país de Seír, al campo de Edom,
Jacob se llenó de miedo y angustia, y dividió en dos campamentos su gente, sus posesiones, ovejas, vacas y camellos,
Esaú corrió a recibirlo, lo abrazó, se le echó al cuello y lo besó llorando.
Entonces el rey David fue a presentarse ante el Señor, y dijo: ¿Quién soy yo, mi Señor, y qué es mi familia para que me hayas hecho llegar hasta aquí?
Atiende a mis clamores, que estoy agotado; líbrame de mis perseguidores, más fuertes que yo;
Guarda mi vida y líbrame, que no quede defraudado de haberme acogido a ti.
préstame oído, ven aprisa a librarme, sé mi roca de refugio, alcázar que me salve;
Hazme justicia, oh Dios, defiende mi causa contra gente desleal, sálvame del hombre traidor y malvado.
Hermano ofendido es plaza fuerte, las pendencias son cerrojo de castillo.
Si es así, el Dios a quien veneramos puede librarnos del horno encendido y nos librará de tus manos.
clamor de guerra se alzará contra tu pueblo; tus fortalezas serán arrasadas, como arrasó Salmón a Bet Arbel; cuando la batalla, estrellaron a la madre con los hijos.
Si de camino encuentras un nido de pájaros en un arbusto o en el suelo, con pollos o huevos y la madre junto a ellos, no te llevarás á la madre con los hijos;
Entonces gritaron al Señor: 'Hemos pecado, porque hemos abandonado al Señor, para servir a Baal y Astarté; líbranos del poder de nuestros enemigos y te serviremos'.
El Señor sea juez y sentencie nuestro pleito, vea y defienda mi causa, librándome de tu mano.