Después de estos sucesos, Abrán recibió en una visión la palabra del Señor: No temas, Abrán; yo soy tu escudo y tu paga será abundante.
Génesis 15:4 - Nueva Biblia Española (1975) Pero el Señor le dijo lo siguiente: No te heredará ése; uno salido de tus entrañas te heredará. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Luego vino a él palabra de Jehová, diciendo: No te heredará este, sino un hijo tuyo será el que te heredará. Biblia Nueva Traducción Viviente Después el Señor le dijo: —No, tu siervo no será tu heredero, porque tendrás un hijo propio, quien será tu heredero. Biblia Católica (Latinoamericana) Entonces le llegó una palabra de Yavé: 'Tu heredero no será Eliezer, sino un hijo tuyo, nacido de tu propia carne y sangre. La Biblia Textual 3a Edicion Pero, he aquí la palabra de YHVH a él, diciendo: No te heredará éste, sino que te heredará uno que saldrá de tus entrañas. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Pero Yahveh le respondió: 'No será ése tu heredero; te heredará el salido de tus entrañas'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y he aquí, vino a él la palabra de Jehová, diciendo: No te heredará este, sino el que saldrá de tus entrañas será tu heredero. |
Después de estos sucesos, Abrán recibió en una visión la palabra del Señor: No temas, Abrán; yo soy tu escudo y tu paga será abundante.
La bendeciré y te dará un hijo y lo bendeciré; de ella nacerán pueblos y reyes de naciones.
Pero Dios dijo a Abrahán: Note aflijas por el niño y la sirvienta. Haz exactamente lo que te dice Sara, porque es Isaac quien continúa tu descendencia, '
Luego dijo David a Abisay y a todos sus cortesanos: Ya ven. Un hijo mío, salido de mis entrañas, intenta matarme, ¡y les extraña ese benjaminita! Dejen que me maldiga, porque se lo ha mandado el Señor.
Y cuando hayas llegado al término de tu vida y descanses con tus antepasados, estableceré después de ti a una descendencia tuya, nacida de tus entrañas, y consolidaré tu reino.
Entonces el Señor envió un ángel, que aniquiló a todos los soldados y a los jefes y oficiales del campamento del rey asirio. Este volvió a su país derrotado, y una vez que entró en el templo de su dios lo asesinaron allí sus propios hijos.