Total de objetos de oro y plata: cinco mil cuatrocientos, Sesbasar los llevó todos consigo cuando los desterrados subieron de Babilonia a Jerusalén.
Esdras 1:8 - Nueva Biblia Española (1975) Ciro de Persia lo consignó al tesorero Mitrídates, que lo contó delante de Sesbasar, príncipe de Judá. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Los sacó, pues, Ciro rey de Persia, por mano de Mitrídates tesorero, el cual los dio por cuenta a Sesbasar príncipe de Judá. Biblia Nueva Traducción Viviente Ciro le ordenó a Mitrídates, el tesorero de Persia, que contara esos artículos y se los entregara a Sesbasar, el líder de los desterrados que regresaban a Judá. Biblia Católica (Latinoamericana) Ciro rey de Persia los mandó retirar por intermedio del tesorero Mitrídates, quien los contó delante de Sesbasar, príncipe de Judá. La Biblia Textual 3a Edicion Los hizo traer pues Ciro rey de Persia, por medio del tesorero Mitrídates, quien los consignó en mano de Sesbasar, el príncipe de Judá. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Ciro, rey de Persia, se los consignó al tesorero Mitrídates, que los contó en presencia de Sesbasar, príncipe de Judá. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Los sacó, pues, Ciro, rey de Persia, por mano de Mitrídates el tesorero, el cual los dio por cuenta a Sesbasar, príncipe de Judá. |
Total de objetos de oro y plata: cinco mil cuatrocientos, Sesbasar los llevó todos consigo cuando los desterrados subieron de Babilonia a Jerusalén.
Fueron con Zorobabel, Josué, Nehemías, Serayas, Reelayas, Mardoqueo, Bilsán, Mispar, Bigvay, Rejún y Baná. Lista de los seglares:
Además, los objetos de oro y plata que Nabucodonosor se llevó del templo de Jerusalén al de Babilonia el rey Ciro mandó sacarlos de este último y los consignó a un hombre llamado Sesbasar, al que nombró sátrapa,
Sesbasar vino, echó los cimientos del templo de Jerusalén y desde entonces lo estamos construyendo; pero todavía no hemos terminado'.
Zorobabel, hijo de Sealtiel, y Josué, hijo de Yosadac, se pusieron a reconstruir el templo de Jerusalén, acompañados y alentados por los profetas de Dios.
Tomaré cuentas a Bel en Babilonia y le sacaré el bocado de la boca. Ya no confluirán a él los pueblos, y hasta las murallas de Babilonia se desplomarán.
El año segundo del reinado de Darío, el día primero del sexto mes, el Señor dirigió la palabra por medio del profeta Ageo, a Zorobabel, hijo de Sealtiel, gobernador de Judea, y a Josué, hijo de Yosadac, sumo sacerdote:
El Señor movió a Zorobabel, hijo de Sealtiel, gobernador de Judea; a Josué, hijo de Yosadac, sumo sacerdote, y al resto del pueblo; ellos fueron y emprendieron las obras del templo del Señor de los ejércitos, su Dios.