Que tus ojos, Dios mío, estén abiertos y tus oídos atentos a las súplicas que se hagan en este lugar.
Efesios 3:18 - Nueva Biblia Española (1975) con eso serán capaces de comprender, en compañía de todos los consagrados, lo que es anchura y largura, altura y profundidad, Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 seáis plenamente capaces de comprender con todos los santos cuál sea la anchura, la longitud, la profundidad y la altura, Biblia Nueva Traducción Viviente Espero que puedan comprender, como corresponde a todo el pueblo de Dios, cuán ancho, cuán largo, cuán alto y cuán profundo es su amor. Biblia Católica (Latinoamericana) Que sean capaces de comprender, con todos los creyentes, cuán ancho, y cuán largo, y alto y profundo es, La Biblia Textual 3a Edicion seáis plenamente capaces de comprender con todos los santos cuál es la anchura y la longitud, y la altura, y la profundidad, Biblia Serafín de Ausejo 1975 seáis capaces de captar, con todo el pueblo santo, cuál es la anchura y largura, la altura y profundidad, Biblia Reina Valera Gómez (2023) podáis comprender con todos los santos cuál sea la anchura, la longitud, la profundidad y la altura; |
Que tus ojos, Dios mío, estén abiertos y tus oídos atentos a las súplicas que se hagan en este lugar.
Pero la misericordia del Señor con sus fieles dura siempre, su justicia pasa de hijos a nietos,
Que todas tus criaturas te den gracias, Señor; que te bendigan tus fieles;
Como el cielo está por encima de la tierra, mis caminos están por encima de los suyos y mis planes de sus planes.
El valle de Hinón quedará bloqueado, porque el valle entre los dos montes seguirá su dirección. Y ustedes huirán como cuando el terremoto en tiempos de Ozías, rey de Judá. Y vendrá el Señor, mi Dios, con todos sus consagrados.
Nadie tiene amor más grande por los amigos, que uno que da la vida por ellos.
pues, olvidándose de la rehabilitación que Dios da y porfiando por mantenerla a su modo, no se sometieron a la rehabilitación de Dios.
El favor del Señor Jesús Mesías y el amor de Dios y la solidaridad del Espíritu Santo estén con todos ustedes.
y ya no vivo yo, vive en mí el Mesías; y mi vivir humano de ahora es un vivir de la fe en el Hijo de Dios, que me demostró su amor entregándose por mí.
El Mesías nos rescató de la maldición de la Ley, haciéndose por nosotros un maldito, pues dice la Escritura: 'Maldito todo el que cuelga de un palo';
hacer la unidad del universo por medio del Mesías, de lo terrestre y de lo celeste.
Por eso, por lo que a mí toca, enterado de su adhesión al Señor Jesús y de su amor a todos los consagrados,
y de conocer lo que supera todo conocimiento, el amor del Mesías, llenándose de la plenitud total, que es Dios.
desde que nos enteramos de su adhesión al Mesías Jesús y del amor que tienen a todos los consagrados.
Sin discusión, grande es el misterio que veneramos: El se manifestó como hombre, lo rehabilitó el espíritu, se apareció a los mensajeros, se proclamó a las naciones, se le vio en el mundo, fue elevado a la gloría.
Al que salga vencedor lo sentaré en mi trono, a mi lado, lo mismo que yo, cuando vencí, me senté en el trono de mi Padre, a su lado.