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Apocalipsis 18:13 - Nueva Biblia Española (1975)

la canela, el clavo y las especias, perfumes e incienso, vino y aceite, flor de harina y trigo, ganado mayor y menor, caballos, carros, esclavos y siervos.

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Biblia Reina Valera 1960

y canela, especias aromáticas, incienso, mirra, olíbano, vino, aceite, flor de harina, trigo, bestias, ovejas, caballos y carros, y esclavos, almas de hombres.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

También compró canela, especias, especias aromáticas, mirra, incienso, vino, aceite de oliva, harina refinada, trigo, ganado, ovejas, caballos, carretas y cuerpos, es decir, esclavos humanos.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

especias, perfumes, mirra e incienso; vino y aceite, harina y trigo, vacunos y corderos, caballos y carruajes, esclavos y mercadería humana.

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La Biblia Textual 3a Edicion

y de canela, y de especia, e incienso, y mirra, y olíbano, y de vino y aceite, y de flor de harina y trigo, y de bestias de carga, y de ovejas, y de caballos, y de carros, y de esclavos,° y de almas de hombres.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

canela y plantas olorosas; perfumes, mirra e incienso; vino y aceite; flor de harina y trigo; ganado mayor y ovejas; caballos y carros, siervos y esclavos;

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

y canela, y aromas, y ungüentos, e incienso, y vino, y aceite; y flor de harina y trigo, y bestias, y ovejas; y caballos, y carros, y esclavos, y almas de hombres.

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Apocalipsis 18:13
25 Tagairtí Cros  

La reina regaló al rey cuatro mil kilos de oro, gran cantidad de perfumes y piedras preciosas. Nunca llegaron tantos perfumes como los que la reina de Sabá regaló al rey Salomón.


sin contar el proveniente de impuestos a los comerciantes, al tránsito de mercancías y a los reyes de Arabia y gobernadores del país.


Y cada cual traía su obsequio: vajillas de plata y oro, mantos, perfumes y aromas, caballos y muías. Y así todos los años.


Se apoderaron de su ganado: cincuenta mil camellos, doscientas cincuenta mil ovejas, dos mil burros.


¡Bendito sea el Señor, tu Dios, que, por el amor con que quiere conservar para siempre a Israel, te ha elegido para colocarte en el trono, como rey de ellos por la gracia del Señor, tu Dios, para que gobiernes con justicia!


y les dije: Nosotros, en la medida de nuestras posibilidades, rescatamos a nuestros hermanos judíos vendidos a los paganos, Y ustedes venden a sus hermanos para que luego nos los vendan a nosotros. Se quedaron cortados, sin respuesta,


El que secuestra a un hombre, para venderlo o para retenerlo, es reo de muerte.


he perfumado la alcoba con mirra, áloe y cinamomo.


es mejor el olor de tus perfumes. Tu nombre es como un bálsamo fragante, y de ti se enamoran las doncellas.


¿Qué es eso que sube por el desierto como columna de humo, como nube de incienso y de mirra y perfumes de mercaderes?


al escucharlo se me escapa el alma. Ya me he levantado a abrir a mi amado: mis manos gotean perfume de mirra, mis dedos mirra que fluye por la manilla de la cerradura.


Así dice el Señor: ¿Dónde está el acta de repudio con que despedí a su madre? ¿O a cuál de mis acreedores los he vendido? Miren, por sus culpas fueron vendidos, por sus crímenes fue repudiada su madre.


Grecia, Tubal y Mosoc comerciaban contigo; con esclavos y objetos de bronce te pagaban.


Así dice el Señor: A Israel, por tres delitos y por el cuarto, no le perdonaré: porque venden al inocente por dinero y al pobre por un par de sandalias;


beben vino en copas, se ungen con perfumes exquisitos y no se duelen del desastre de José.


para comprar por dinero al desvalido y al pobre por un par de sandalias.


Si descubren que uno ha secuestrado a un hermano suyo israelita, para explotarlo o venderlo, el secuestrador morirá; así extirparás la maldad de ti.


El Señor te hará volver en barcos a Egipto, por ese camino del que yo te dije 'No lo volverás a ver', y allí serán ustedes puestos en venta como esclavos y esclavas a sus enemigos, y no habrá comprador.


para los libertinos, invertidos y traficantes de esclavos; para los tramposos, perjuros y para todo lo demás que se oponga a la sana enseñanza


Llevados de la codicia, los explotarán a ustedes con discursos engañosos. Pero hace mucho tiempo que su sentencia no huelga y que el desastre que los espera no pega ojo.


La fruta de otoño que excitaba tu apetito se alejó de ti; toda opulencia y esplendor se acabó para ti, y nunca volverán.


Los que comerciaban en estos géneros y se hicieron ricos a costa de ella se detendrán a distancia por miedo de su tormento, llorando y lamentándose así: