los hizo custodiar en casa del mayordomo, en la cárcel donde José estaba preso.
2 Samuel 20:3 - Nueva Biblia Española (1975) Cuando David llegó a su palacio de Jerusalén, encerró en el harén a las diez concubinas que había dejado al cuidado del palacio; las mantenía, pero no se acostó con ellas; quedaron como viudas de por vida. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y luego que llegó David a su casa en Jerusalén, tomó el rey las diez mujeres concubinas que había dejado para guardar la casa, y las puso en reclusión, y les dio alimentos; pero nunca más se llegó a ellas, sino que quedaron encerradas hasta que murieron, en viudez perpetua. Biblia Nueva Traducción Viviente Cuando David llegó a su palacio en Jerusalén, tomó a las diez concubinas que había dejado para que cuidaran el palacio y las puso en reclusión. Les proveyó para sus necesidades, pero no volvió a acostarse con ninguna. De modo que cada una de ellas vivió como una viuda hasta que murió. Biblia Católica (Latinoamericana) David entró nuevamente en su palacio de Jerusalén, ordenó que salieran las diez concubinas que había dejado para que cuidaran el palacio y las puso en una casa bajo vigilancia. Aseguró su manutención pero no se acercó más a ellas. Hasta el día de su muerte estuvieron allí encerradas llevando una vida de viudas. La Biblia Textual 3a Edicion Cuando David llegó a su casa en Jerusalem, tomó el rey a las diez concubinas que había dejado para cuidar la casa y las puso en reclusión, y aunque las sustentó, nunca más se llegó a ellas; y ellas permanecieron recluidas hasta el día de su muerte, en viudez perpetua. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Entró luego David en su palacio de Jerusalén. Tomó el rey las diez concubinas que había dejado al cuidado del palacio y las puso bajo custodia. Proveyó su sustento, pero ya no se acercó más a ellas. Quedaron, pues, ellas recluidas hasta el día de su muerte como viudas de por vida. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y luego que llegó David a su casa en Jerusalén, tomó el rey las diez mujeres concubinas que había dejado para guardar la casa, y las puso en una casa en guarda, y les dio de comer; pero nunca más entró a ellas, sino que quedaron encerradas hasta que murieron en viudez de por vida. |
los hizo custodiar en casa del mayordomo, en la cárcel donde José estaba preso.
Los israelitas, dejando a David, siguieron a Sebá-, hijo de Bicrí, mientras que los de Judá, desde el Jordán hasta Jerusalén, siguieron fieles al rey.