Al acercarse al campamento y ver el becerro y las danzas, Moisés, enfurecido, tiró las losas y las rompió al pie del monte.
1 Samuel 11:6 - Nueva Biblia Española (1975) y al oírlo Saúl, lo invadió el espíritu de Dios; enfurecido, Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Al oír Saúl estas palabras, el Espíritu de Dios vino sobre él con poder; y él se encendió en ira en gran manera. Biblia Nueva Traducción Viviente Entonces el Espíritu de Dios vino con poder sobre Saúl y se enojó mucho. Biblia Católica (Latinoamericana) Al oír Saúl esas palabras se apoderó de él el espíritu de Dios y se puso furioso. La Biblia Textual 3a Edicion Al oír estas palabras, el Espíritu de Dios vino poderosamente sobre Saúl, y su ira se encendió en gran manera. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Al oír estas palabras, se apoderó de él el espíritu de Dios y, encendido sobremanera en cólera, Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y al oír Saúl estas palabras, el Espíritu de Dios vino sobre él, y se encendió en ira en gran manera. |
Al acercarse al campamento y ver el becerro y las danzas, Moisés, enfurecido, tiró las losas y las rompió al pie del monte.
Echándoles en torno una mirada de ira, dolido desu obcecación, le dijo al hombre: Extiende el brazo. Lo extendió y su brazo quedó normal.
Si se indignan, no lleguen a pecar, que la puesta del sol no les sorprenda en su enojo;
El espíritu del Señor vino sobre Jefté, que atravesó Galaad y Manases, pasó a Atalaya de Galaad, de allí marchó contra los amonitas
Y el espíritu del Señor comenzó a agitarlo en Castrodán, entre Sorá y Estaol.
el espíritu del Señor invadió a Sansón, que descuartizó al león como quien descuartiza un cabrito, y eso que no llevaba nada en la mano. Pero no se lo contó a sus padres.
Cuando llegó a La Quijada, los filisteos salieron a recibirlo con gran algazara; pero lo invadió el espíritu del Señor, y las cuerdas de sus brazos fueron como mecha que se quema, y las ataduras de sus manos se deshicieron.
Vino sobre él el espíritu del Señor, gobernó a Israel y salió a luchar; el Señor puso en sus manos a Cusan Risatain, rey de la Siria Entremos, y Otoniel se le impuso.
El espíritu del Señor se apoderó de Gedeón, que tocó a rebato, y Abiezer corrió a unírsele.
De allí fueron a Loma, y de pronto dieron con un grupo de profetas. El espíritu de Dios invadió a Saúl y se puso a danzar entre ellos.
Te invadirá el espíritu del Señor, te convertirás en otro hombre y te mezclarás en su danza.
Samuel tomó el cuerno de aceite y lo ungió en medio de sus hermanos. En aquel momento invadió a David el espíritu del Señor, y estuvo con él en adelante. Samuel emprendió la vuelta a Rama.
El espíritu del Señor se había apartado de Saúl, y lo agitaba un mal espíritu enviado por el Señor.