Bíobla ar líne

Fógraí


An Bíobla ar fad Sean-Tiomna Tiomna Nua




1 Corintios 8:12 - Nueva Biblia Española (1975)

AL pecar de esa manera contra los hermanos, haciendo daño a su conciencia insegura, pecan contra el Mesías.

Féach an chaibidil
Taispeáin Interlinear Bible

Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

De esta manera, pues, pecando contra los hermanos e hiriendo su débil conciencia, contra Cristo pecáis.

Féach an chaibidil

Biblia Nueva Traducción Viviente

Cuando ustedes pecan contra otros creyentes al alentarlos a hacer algo que para ellos está mal, pecan contra Cristo.

Féach an chaibidil

Biblia Católica (Latinoamericana)

Cuando ustedes ofenden a sus hermanos hiriendo las conciencias que son todavía débiles, pecan contra el mismo Cristo.

Féach an chaibidil

La Biblia Textual 3a Edicion

Y así, pecando contra los hermanos, y golpeando fuertemente sus débiles conciencias, contra el Mesías pecáis.

Féach an chaibidil

Biblia Serafín de Ausejo 1975

Y así, pecando contra los hermanos e hiriendo su conciencia débil, estáis pecando contra Cristo.

Féach an chaibidil

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

De esta manera, pues, pecando contra los hermanos, e hiriendo su débil conciencia, contra Cristo pecáis.

Féach an chaibidil
Aistriúcháin eile



1 Corintios 8:12
18 Tagairtí Cros  

Después Abimelec llamó a Abrahán y le dijo: ¿Qué has hecho con nosotros? ¿Qué mal te he hecho, para que nos expusieras a mí y a mi reino a cometer un pecado tan grave? Te has portado conmigo como no se debe.


Intervino Rubén: ¿No les decía yo: 'No pequen contra el muchacho', y no me hicieron caso? Ahora nos piden cuentas de su sangre.


Esta tarde les dará de comer carne y mañana los saciará de pan; el Señor les ha oído protestar contra él; nosotros ¿qué somos? No han protestado contra nosotros, sino contra el Señor.


Moisés dijo a Aarón: ¿Qué te ha hecho este pueblo para que lo hayas arrastrado a tan enorme pecado?


Cuidado con mostrar desprecio a un pequeño de estos, porque les digo que sus ángeles están viendo siempre en el cielo el rostro de mi Padre celestial'.


Entonces se adelantó Pedro y le preguntó: Señor, y si mi hermano me sigue ofendiendo, ¿cuántas veces lo tendré que perdonar?, ¿siete veces?


en cambio, al que escandalice a uno de estos pequeños que creen en mí, más le convendría que le colgaran al cuello una rueda de molino y lo sepultaran en el fondo del mar.


Y el rey les contestará: Se lo aseguro: Cada vez que lo hicieron con uno de estos hermanos míos tan pequeños, lo hicieron conmigo.


Y él les contestará: Se lo aseguro: Cada vez que dejaron de hacerlo con uno de estos tan pequeños, dejaron de hacerlo conmigo.


Y al que escandalice a uno de esos pequeños que creen en mí sería mejor para él que le encajaran en el cuello una piedra de molino y lo echaran al mar,


Más le valdría que le encajaran en el cuello una piedra de molino y lo arrojaran al mar, antes que escandalizar a uno de estos pequeños.


No destruyas la obra de Dios por una cuestión de comida; todo es puro, pero está mal comer causando escándalo.


Es un hecho que el cuerpo, siendo uno, tiene muchos miembros, pero los miembros, aun siendo muchos, forman entre todos un solo cuerpo.


Si un hombre ofende a otro, Dios puede hacer de arbitro; pero si un hombre ofende al Señor, ¿quién intercederá por él? Pero ellos no hacían caso a su padre, porque el Señor había decidido que murieran.


Padre mío, mira en mi mano el borde de tu manto; si te corté el borde del manto y no te maté, ya ves que mis manos no están manchadas de maldad, ni de traición, ni de ofensa contra ti, mientras que tú me acechas para matarme.