1 Yahveh dispuso que un gran pez se tragara a Jonás, y Jonás estuvo en el vientre del pez tres días y tres noches. 2 Jonás oró a Yahveh, su Dios, desde el vientre del pez, 3 y dijo: 'Desde mi angustia clamé a Yahveh, y él me respondió. Desde el seno del seol pedí auxilio, y tú escuchaste mi voz. 4 Me arrojaste al abismo, al seno de los mares, y la corriente me envolvió; todas tus olas, tu oleaje, cargaron sobre mí. 5 Entonces yo me dije: ¡he sido arrojado de delante de tus ojos! ¿Cómo podré contemplar de nuevo tu santo templo? 6 El agua me alcanzaba hasta el cuello, el abismo me envolvía, las algas se enredaban en mi cabeza. 7 Hasta las raíces de los montes descendí, los cerrojos de la tierra se cerraban por siempre sobre mí. Mas tú sacaste mi vida de la fosa, Yahveh, Dios mío. 8 Cuando en mí desfallecía mi alma, me acordé de Yahveh y mi oración llegó hasta ti, hasta tu santo templo. 9 Los adoradores de ídolos vanos malogran su piedad. 10 Mas yo, con voz de alabanza, te ofreceré sacrificios; cumpliré el voto que te hice. ¡De Yahveh viene la salvación!'. |
Copyright © Serafín de Ausejo 1975.