Isaías 10:12 - Biblia Version Moderna (1929)12 Por lo mismo, sucederá que cuando el Señor haya acabado de hacer toda su obra en el Monte de Sión y en Jerusalem, castigaré el fruto del orgulloso corazón del rey de Asiria, y la gloria de sus ojos altivos. Δείτε το κεφάλαιοΠερισσότερες εκδόσειςBiblia Reina Valera 196012 Pero acontecerá que después que el Señor haya acabado toda su obra en el monte de Sion y en Jerusalén, castigará el fruto de la soberbia del corazón del rey de Asiria, y la gloria de la altivez de sus ojos. Δείτε το κεφάλαιοBiblia Nueva Traducción Viviente12 Después de que el Señor haya utilizado al rey de Asiria para llevar a cabo sus propósitos en el monte Sion y en Jerusalén, se volverá contra el rey de Asiria y lo castigará, porque es soberbio y arrogante. Δείτε το κεφάλαιοBiblia Católica (Latinoamericana)12 Pero esto ha de suceder: cuando el Señor haya terminado su obra en la montaña de Sión y en Jerusalén, castigará la soberbia del corazón del rey de Asiria y la mirada despreciativa de sus ojos. Porque dijo: Δείτε το κεφάλαιοLa Biblia Textual 3a Edicion12 °Por eso, cuando Adonay acabe toda su obra en el Monte Sión y en Jerusalem, Castigará° el fruto de la soberbia del corazón del rey de Asiria, Y la arrogancia altanera de sus ojos. Δείτε το κεφάλαιοBiblia Serafín de Ausejo 197512 Ahora bien, cuando Yahveh haya acabado su obra en el monte de Sión y en Jerusalén, castigará el fruto del soberbio corazón del rey de Asiria y la arrogancia de sus ojos altaneros. Δείτε το κεφάλαιο |
Por tanto, con esto será perdonada la iniquidad de Jacob; y este es todo el fruto de ello, a saber, el quitar su pecado; mientras Israel pone todas las piedras del altar idolátrico, como piedras de cal, hechas pedazos; de manera que nunca jamás vuelvan a levantarse las Asheras y las imágenes del sol.
a fin de que ninguno de los árboles junto a las aguas se engría más a causa de su elevación, ni ponga su cúspide entre las nubes; ni confíe en sí mismo a causa de su elevación, ninguno de los que son regados con las aguas: porque todos ellos están entregados a la muerte, a la tierra de abajo, en medio de los hijos de los hombres, juntamente con los que bajan al hoyo.